El Cautivo cumple la tradición y entrega la túnica del preso que liberará el Jueves Santo

Es el recluso nº 14 que será indultado en Melilla. Ninguno de los anteriores ha vuelto a delinquir.

La Cofradía del Cautivo, el Centro Penitenciario de Melilla y el Voluntariado Cristiano de Prisiones cumplieron ayer con la tradición. Como cada Miércoles de Ceniza desde hace catorce años, el hermano mayor de la cofradía entregó al responsable de la cárcel la túnica morada que el próximo Jueves Santo vestirá el preso indultado del 2014. No se sabe si es hombre o mujer, ni su edad, ni la razón por la que ingresó en este centro. Lo único que trascendió ayer, como es habitual, es que se trata de una persona en condiciones de pasar al tercer grado y con un comportamiento adecuado para poder ser beneficiario de este indulto.
El director accidental de la prisión, Domingo Barranquero, destacó ayer la importante labor que realiza el Voluntariado Cristiano para velar durante un año por el recluso que recuperará la libertad el próximo Jueves Santo. De hecho, Barranquero señaló que la labor de esta entidad diferencia a Melilla del resto de ciudades en las que se indulta a un preso coincidiendo con la celebración de la Semana Santa.
Por su parte, el hermano mayor de la Cofradía del Cautivo, Gregorio Castillo, resaltó que en los trece años que se lleva repitiendo esta tradición, ninguno de los presos indultados ha reincidido. “Lo más importante es que ninguno ha vuelto a delinquir”, apostilló.
Castillo apuntó que el objetivo de la Cofradía es dar una oportunidad a personas que seguramente no la han tenido. “Muchas de las personas que están ahora mismo en prisión, nunca han tenido una oportunidad de cambiar sus vidas. Eso es lo que nosotros queremos darle al preso que salga liberado el próximo Jueves”, apostilló.
Asimismo, aseguró que son conscientes de que es una gran responsabilidad cuidar de que esta persona logre reinsertarse en la sociedad. La Cofradía junto al Voluntariado se encargarán de ofrecerle al indultado la opción de encontrar un trabajo o una vivienda. Durante los próximos doce meses serán los encargados de cuidar de este recluso y velar para que no vuelva a delinquir. Castillo señaló que hay muchas personas implicadas para lograr que todo funciones y aseguró que están “muy orgullosos” de la labor que se realiza.
El próximo Jueves Santo en la avenida Juan Carlos I, frente a la tribuna de las autoridades, uno de los jueces de Melilla leerá el acta con la que se indulta al preso. A partir de ese momento el recluso será libre. El preso decidirá también si quiere procesionar junto al los cofrades del Cautivo o si por el contrario prefiere quedarse fuera. Su identidad permanecerá en secreto. Desde ese día dependerá de él conservar la libertad y aprovechar la segunda oportunidad que le han brindado.