Cerca de 20 niñas participaron en el concurso que organizó la asociación vecinal. Hasta los bebés se disfrazaron.
Los carnavales también llegaron a la sede de la Asociación de Vecinos Ciudad de Málaga, donde los más pequeños del barrio disfrutaron de una fiesta infantil en su honor. Repartieron caramelos y también bocadillos y refrescos. Todo para calentar los motores mientras se organizaba el concurso de Reina del Carnaval en el que se inscribieron cerca de una veintena de niñas del barrio.
Con sus mejores galas, las niñas lucieron espectaculares encima del escenario, mientras a la sede de la entidad vecinal no dejaban de llegar niños y más niños. Acompañados siempre de sus orgullosos padres, todos disfrutaron de una agradable velada.
Hasta los bebés estaban disfrazados de conejos, pollos y una Caperucita Roja no dudó en acudir a la fiesta, gracias a que no se encontró al lobo feroz por el camino.
Un piloto de Fórmula 1 corría veloz a por su bolsa de caramelos, mientras Minnie intentaba coger una respetando la cola. No faltaron un grupo de hippies y una sirenita en esta fiesta.
El presidente de la asociación vecinal, Antonio Casademunt, afirmó que esta fiesta está dedicada especialmente a los niños porque “verlos disfrutar hace muy felices a los pequeños y a los socios también”.
Y así fue, ya que la fiesta no acabó hasta entrada la noche y mientras los más mayores disfrutaban de un piscolabis en la sede vecinal, los pequeños correteaban por los jardines del barrio.