La Escuela de Flamenco ofrece clases de guitarra, cajón y cante de lunes a jueves. Los viernes se creará un cuadro flamenco.
La Escuela de Flamenco de Melilla ya está en marcha. Ayer comenzaron las clases de guitarra, cajón y cante que acercaran a unos 40 alumnos al mundo de este arte tan complejo. El Instituto de las Culturas puso en marcha esta iniciativa el pasado año y gracias a la buena aceptación que tuvo entre los melillenses se ha vuelto a convocar un nuevo curso para que los interesados en esta manifestación cultural puedan no sólo aprender a cantar o tocar un instrumento, sino su historia.
El encargado de presentar este curso fue el profesor de guitarra e historia del flamenco, José Heredia Carmona, que recibió ayer en el colegio Velázquez a más de 35 alumnos que han formalizado sus matrículas este año. Será en este centro educativo donde se desarrollarán las clases, que se impartirán de 17:00 a 21:00 horas de lunes a jueves. Cada grupo contará con un horario diferente, aunque las clases son de dos horas dos días a la semana. Los viernes se dedicarán a crear cuadros flamencos, es decir, los alumnos de guitarra se mezclarán con los de cante y cajón flamenco para aprender cómo suenan el arte de las seguidillas o las alegrías en grupo. Los maestros dividirán a los alumnos en grupos de seis o siete personas para que la atención sea más personal entre alumno y profesor.
Además, participarán en las actividades que organice la Ciudad y el Instituto de las Culturas, como el pasado año que ofrecieron un recital flamenco en Ramadán.
Las clases
Heredia Carmona no está solo en este proyecto. El melillense Rafael Carmona Moreno es el otro profesor, el que enseñará cajón y cante, a los alumnos de esta escuela. Los dos directores de esta academia serán los encargados de sacar el arte y el flamenco que guardan los alumnos en sus manos y voces. El profesor de guitarra e historia del flamenco aseguró a El Faro que el periodo de matriculación para participar en la escuela estará abierto un par de semanas más. Aunque destacó que sólo podrán ofrecer 50 plazas para estos talleres.
La presidenta del Instituto de las Culturas, Fadela Mohatar, aseguró ayer que la continuación de este proyecto sirve para dar formación a los melillenses que demandan conocer más de cerca el flamenco y para potenciar este saber patrimonio de la humanidad en la ciudad. Apuntó que las clases se continuarán ofreciendo en el colegio Velázquez gracias a la colaboración de su director, Juan Manuel Medina, que cede estas instalaciones. Por ello, no van a buscar una nueva ubicación para esta escuela.
La Casa Amazigh, para este año
La presidenta del Instituto de las Culturas, Fadela Mohatar, aseguró ayer que la Casa Amazigh será un proyecto que se lleve a cabo en Melilla este año.
Mohatar destacó que esta entidad pretende proteger las tradiciones del pueblo amazigh y revitalizar algunas de sus costumbres que se están perdiendo por la influencia de otras culturas y religiones. Afirmó que se está trabajando en la creación de esta casa que será nacional y que tendrá relación con las que dependen del Ministerio de Exteriores, como es el caso de la Árabe o la Sefardí.
La presidenta del Instituto de las Culturas resaltó que el pasado sábado se llevó a cabo una de las iniciativas que pretenden recuperar parte del patrimonio amazigh de la ciudad, como es el caso de la celebración del año nuevo de esta cultura milenaria. Unas 700 personas asistieron a la representación teatral y al recital de unos poemas musicales ‘izri’ y degustaron platos típicos de este pueblo.
Mohatar destacó que en este evento se dio protagonismo a la mujer amazigh, que es la transmisora de las tradiciones y de los valores. Además, aseveró que la institución recibió numerosas felicitaciones por la organización de esta actividad.