El arte en Melilla también cuida el medio ambiente

La Escuela de Arte Miguel Marmolejo es la única de esta especialidad de toda España que se ha embarcado en proyecto mundial ‘Ecoescuela’.

La Escuela de Arte Miguel Marmolejo (EAMM) es la única de estas características en España que está dentro del programa ‘Ecoescuela’. Ingresar en este proyecto ha supuesto al centro numerosos cambios, ya que no sólo se trata de realizar clases de tutoría para la concienciación de los alumnos sobre el cuidado del medio ambiente ni de colocar papeleras de colores por todo el edificio. En una escuela de arte, el uso de determinados materiales hace que el reciclado sea más complejo que para otros centros. El coordinador de este programa en la EAMM, Daniel Aguilar, comentó en El Faro cómo se han ido ‘reeducando’ para encaminarse hacia una escuela ecológica.
La EAMM entró a formar parte de esta iniciativa después de aprobarse en el consejo escolar en el curso pasado, es decir, en el 2010-2011.

Un programa innovador

‘Ecoescuela’ es un programa a nivel internacional que se aplica en los centros docentes para concienciar a los alumnos, profesorado y el resto de la comunidad educativa en varios aspectos del cuidado del medio ambiente, como son reducir el consumo de energía y el gasto de agua y el reciclado de todos los materiales y desechos posibles.
En España se canaliza a través de la asociación Adeac, que se encarga tanto de certificar los centros educativos con bandera verde como las playas con bandera azul.
‘Ecoescuela’ cuenta con un programa dividido en tres años para que sea aplicado en todos los centros que forman parte de esta iniciativa. Así, se trabaja sobre los residuos y el reciclaje, el ahorro de energía y el control del gasto del agua.
La EAMM comenzó en el 2010 con el reciclado de residuos y fue gracias a la Consejería de Educación que pudieron comprar las papeleras para separar los diferentes tipos de basura.
Plástico, orgánico, vidrio, papel, elementos electrónicos, fluorescentes y bombillas encuentran un futuro mejor en cajas separadas y determinadas por colores y símbolos que ayudan a reconocer a primera vista dónde se debe echar cada tipo de basura.
Antes de que llegara esta ayuda de la Ciudad para adquirir estos pequeños contenedores que se han distribuido a lo largo de los pasillos y clases, los profesores de la escuela consiguieron unos cubos que estaban para ser desechados y los reciclaron y adornaron.
Como colocar los cubos de basura nunca es una medida suficiente, la EAMM se llenó de carteles que se sitúan en los tablones de anuncios con los colores para el reciclado de residuos, y también unos pequeños consejos escritos en carteles que cuelgan de las puertas y frente a la consejería y justo antes de la puerta principal han situado ‘el punto limpio’ de la escuela. Además, las clases de tutoría han servido a los alumnos no sólo para estar informados sobre estos cambios, sino para que se conciencien de la importancia de contribuir, aunque sea con pequeños gestos, al cuidado del medio ambiente.
La concienciación no es fácil, tal y como indicó Aguilar, pero cada año se mejora en este aspecto.

‘Eco’ versus ‘Arte’

Aguilar comentó que la ecología entra en conflicto con los talleres de la escuela, ya que muchos de ellos utilizan materiales que contaminan, por ello, la aplicación de este programa ha sido más complejo. Por ejemplo, las pinturas o los químicos del taller de fotografía son algunos de esos elementos que han sido cambiados por otros menos contaminantes. Para el resto de materiales se han pedido los permisos para la recogida de productos altamente contaminantes y que de esta forma, sean destruidos, así se mantiene una colaboración con la Consejería de Medio Ambiente.
Este año, la campaña de ‘Ecoescuela’ está centrada en la reducción del consumo de energía. Así se han propuesto la reducción de un 5% con respecto al pasado año. Para ello, se ha ideado una campaña publicitaria, que cuenta con señales en los interruptores y carteles llamativos para que, por ejemplo, los alumnos no se dejen las luces encendidas cuando salgan del aula y apaguen la calefacción.
Además, esta iniciativa se presentará en un concurso de la UE para la mejor campaña escolar sobre el uso eficiente de la energía en los centros docentes’. Para el próximo curso, reducir el gasto de agua será la principal tarea de esta escuela de arte única en España.