El director provincial de Educación, José Manuel Calzado, aseguró que esta semana vendrán a la ciudad responsables del Ministerio de Educación para entrevistarse con los técnicos de la Consejería de Fomento. Los especialistas de Educación creen que se puede empezar a trabajar en el interior del Mercado Central con un permiso de primera ocupación mientras que se hacen los arreglos necesarios a la infraestructura.
Éste será uno de los temas que se aborde en esta reunión, según indicó Calzado, que confirmó que la situación está en un “parón” y que el objetivo de la visita de los miembros del ministerio es desbloquear el tema del Mercado Central y que durante todo este verano se pueda trabajar en el interior de cara al nuevo curso.
El director provincial insistió en que los técnicos de Educación creen que las obras que aún quedan por realizar no impiden que se pueda entrar en el edificio y se pueda ir adaptando a las necesidades del nuevo curso, como con la instalación del mobiliario, entre otras cuestiones.
Aulas prefabricadas
También se tratará en esta reunión cómo se van a hacer las salidas de emergencia por el barrio del Monte María Cristina, una obra que de la que se iba a hacer cargo la empresa pública Tragsa.
En cuanto a las aulas prefabricadas que están en el cuartel de Santiago, Calzado explicó que ya hay cuatro instaladas, así como el resto de espacios necesarios para las clases e incluso se han hecho varias reformas para incorporar nuevos equipamientos de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). Este hecho ha retrasado la finalización de las obras en unos quince días.
De las cuatro aulas, tres de ellas se usarán para los alumnos que durante este curso han estado en las clases de tres años en el Centro de Profesores y Recursos. La cuarta clase será para niños de 3 años, en muchos casos, hermanos de estos otros alumnos que pasan a segundo de Infantil.
Nuevo colegio
En cuanto a las obras del nuevo colegio Gabriel de Morales, Calzado insistió en que no tienen ninguna novedad.
En este sentido, es preciso recordar que la Consejería de Fomento se comprometió a que el derribo del acuartelamiento comenzaría en marzo. Sin embargo, fuentes consultadas por El Faro indicaron a este periódico que “por motivos administrativos” se está retrasando su puesta en marcha. Sin la demolición de este antiguo acuartelamiento, el Ministerio de Educación no podrá terminar el proyecto de construcción del colegio. Asimismo, las aulas prefabricadas que eran el ‘plan b’ ante la falta de aulas de Infantil y Primaria, tendrán un tiempo limitado de uso y si no se cuenta en esos tres años con un nuevo colegio, volverá a surgir el mismo problema que en el curso pasado: la falta de espacios para los alumnos.