Eduardo Resa: "Hay muchas ganas e ilusión" durante los actos de la Novena

Los cultos para la Novena de la Patrona dieron comienzo el pasado 30 de agosto y se prolongarán hasta el próximo 7 de septiembre. El vicario Episcopal, Eduardo Resa, ha hablado con El Faro sobre estos actos. Cuenta que todos los colectivos se están volcando mucho y que hay muchas ganas e ilusión entre los feligreses por volver a estos actos y ver de nuevo a la Patrona en las calles de Melilla. 

La Novena consiste, como la propia palabra indica, en los nueve días que se dedican a preparar los cultos para la patrona de la ciudad. El vicario Episcopal explica que muchas veces también pueden hacerse quinarios (en 5 días) o triduos (3 días). Únicamente se hace un decenario (10 días) al Espíritu Santo.

A lo largo de estos días, a las 19.30 horas se expone el Santísimo. “Hay un rato de adoración al Señor, tranquilo y sosegado”, explica Resa. A esta hora cuenta que acude un grupo de personas “nutrido y selecto”. 

A las 20.00 horas se reza el santo rosario en honor a la Virgen de la Victoria y se realizan las oraciones correspondientes para que tenga a Melilla bajo su protección. 

Posteriormente, a las 20.30 tiene lugar la misa solemne. Cada día acude a la iglesia del Sagrado Corazón un coro proveniente de las distintas parroquias y comunidades de la ciudad. “Todas pasan por aquí. Algunas incluso dos veces”, señala el vicario.

Este pasado martes 30 de agosto fue el día en el que comenzaron los actos. En él se bendijo a las embarazadas y acudieron distintas asociaciones de la ciudad. Este viernes se presentarán los niños a la Virgen y habrá otro día que se renueven los votos matrimoniales.

Cada día, todos los colectivos de Melilla hacen una ofrenda a la Patrona. Pueden ser flores, como las que lucían en el altar y preparadas ya para el culto de este jueves, o alimentos o donativos para Caritas. “De esta manera, cada día del novenario se compagina la acción de culto con la caritativa social”, explica Resa.

Asimismo, el tema de la predicación que se ha escogido este año para la campaña es ir día a día rezando el Padre Nuestro. El vicario Episcopal asegura que todos los colectivos que participan en los actos de la Novena se están volcando. 

Además, este año está siendo muy significativo. Las ofrendas antes se hacían después de la misa, por lo que muchas personas ya se habían marchado. Ahora se hacen en mitad de la misa: se ofrecen en el altar y luego se disponen todas las flores.

Uno de los “días cumbres” es el domingo 4 de septiembre, cuando tendrá lugar la Misa Rociera en la Mezquita del Toro. Ese día todas las hermandades de Melilla se reúnen allí y le tocan. 

Este año hay muchas ganas e ilusión de volver a estos actos. Aunque la Novena nunca se ha interrumpido. Durante el confinamiento, en 2020, se produjeron los actos, aunque con las medidas de seguridad correspondientes. En 2021, aunque ya estaban las cosas un poco mejor, continuaron con ello. Este 2022 ha vuelto a ser como era antes de la pandemia.

El vicario Episcopal cuenta que solo ha presenciado la Misa Rociera del año 2019, puesto que el resto de años no se ha podido celebrar más. Tampoco ha visto aún a la Virgen de la Victoria procesionar, bien por las lluvias del primer año que estuvo en la ciudad o por la pandemia. Por lo que esta será la primera vez que la vea enfilar las calles de Melilla.

Pero este año hay mucha expectación. Se perciben las ganas e ilusión de los feligreses por ver de nuevo a la Patrona. Resa afirma que muchas personas se acercan a preguntar sobre la Novena y también de las otras parroquias. “La participación es grande en todos los actos de culto”, puntualiza.