EAPN achaca a la desorganización la baja demanda de los comedores

l La plataforma asegura que el servicio tendría más éxito si se hubiera contado con las ONGs.

EAPN asegura que el servicio de comedor escolar de verano tendrían más éxito si se hubiera planificado junto a las ONGs que trabajan con las familias necesitadas de la ciudad. Afirma que una de las posibles causas de que tan sólo se hayan cubierto 100 de las 400 plazas que oferta la Administración se debe a que las colonias de Cáritas también cuentan con un servicio de comidas para 200 niños en riesgo de exclusión social. Según la plataforma de lucha contra la pobreza, el servicio de comedor escolar en verano debería de “planificarse con tiempo y en colaboración con las entidades que atienden a las personas sin recursos”. De esta forma, sería “más eficaz” la política de ayuda a los ciudadanos y se llegaría a más personas afectadas por la crisis.
Destaca que el servicio de comedor es “necesario” porque Melilla tiene uno de los índices de pobreza infantil más altos de España, pues supera el 40% de la población. EAPN afirma que abrir los centros para dar comidas a los escolares es una “medida excepcional y de emergencia” que está justificada con el elevado número de niños que viven bajo el umbral de la pobreza en la ciudad.
La propuesta de la plataforma para que el servicio de comidas sea “un éxito” es que no sólo se den alimentos, sino que la Administración planifique una serie de actividades para los niños que acudan a los comedores. Explica que en otras comunidades, los colegios han organizado talleres durante toda la mañana, además de que los escolares puedan comer en estos centros.
“¿No sería más adecuado completar el servio de comedor escolar con programas de formación y de ocio que favorezcan la participación social infantil dándoles un mayor protagonismo y fomentando su autoestima y habilidades sociales?”, pregunta la entidad. EAPN explica que las familias y los niños que demandan este servicio pueden sentirse “estigmatizados”. Sin embargo, si la Administración ofrece más que un servicio de comidas, ayuda a que las familias participen a nivel social, añade.
Otro de los aspectos que señala la plataforma es que no sólo hay que pesar a corto plazo para luchar contra la pobreza infantil, sino diseñar una serie de actuaciones que vayan más allá de aliviar durante unos meses la necesidades alimenticias de los niños en riesgo de exclusión social.

“Aprovechar” 1,27 millones
EAPN resalta que la llegada a Melilla de 1,27 millones de euros del Gobierno central será “una buena oportunidad” para hacer frente a los problemas de pobreza que hay en la ciudad. “Este dinero puede ser bastante útil si lo complementamos de manera inteligente con el resto de presupuestos de la Administración local que tiene las competencias en materia de reducción de la exclusión social”, señala.
La plataforma asevera que Melilla es una las regiones que mayor cuantía han recibido del Ejecutivo central y por ello, debe aprovecharla, con independencia de la polémica que se ha generado entre varias regiones que reclaman más dinero para aliviar las situación de pobreza en sus autonomías.
A pesar de que Melilla es la segunda región que más partida presupuestaria ha recibido del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a EAPN le parece que es “insuficiente, al igual que “la planificación” que se va a realizar sobre a dónde dirigir esta inversión. La plataforma celebra que se destine 1,27 millones de euros a políticas de inclusión social, aunque apunta que el Ministerio no ha delimitado con detalle los proyectos que se pueden desarrollar con este dinero. Asegura que hay que evitar que “las acciones que se lleven a cabo sean improvisadas, inconexas y dispares”.

Buscar las causas
Por otro lado, la consejera de Bienestar Social y Sanidad, María Antonia Garbín, aseguró el pasado viernes que está buscando las causas de la baja asistencia a los comedores escolares. Garbín señaló que puede ser por el mes sagrado de Ramadán o porque la Ciudad ofrece un servicio similar a través de las colonias urbanas de Cáritas. “Estamos estudiando la situación”, resaltó la consejera, que aseveró que los comedores escolares estarán abiertos durante todo el verano porque es “una obligación”.