Dos golazos del Mar Menor sepultan las intenciones del Melilla

Mar Menor: Facundo Abel López Cifuentes Javi Ramírez Molinero Sergio León (Lleshi, min. 60) Fran Moreno Vázquez (Palazón, min. 82) Silvente (Ballesta, min. 60) Loren (Ayala, min. 82) Ubis (Titi, min. 67).

UD Melilla: Pol Ballesté David Ámez (Cham, min. 63) Vargas Munguía (Iker, min. 63) Jordan Ali Cissé (Serginho, min. 80) Borja López (Sánchez, min. 63) José Antonio (Parla, min. 87) Fran Núñez Del Campo.

Árbitros: Cánovas García-Villarrubia (Comité valenciano). Enseñó tarjeta amarilla a Silvente y Javi Ramírez por el Mar Menor; y a David, Jordan y Del Campo por el Melilla.

Goles 1-0 Vázquez (min. 19). 2-0 Javi Ramírez (min. 53).

Incidencias: Partido correspondiente al grupo IV de la Segunda RFEF, que se disputó en el campo municipal El Pitín, ante unos 800 espectadores que se dieron cita para ver el partido en directo.

El Melilla no pudo romper su racha de salidas sin victorias en San Javier, en un partido que decidieron dos tanto de bella factura de Vázquez y Javi Ramírez, uno en cada tiempo. El 2-0 sufrido ante el Mar Menor fue una losa muy pesada para el cuadro preparado por Manolo Herrero, que seguirá demasiado cerca de esa peligrosa plaza de play-out. Tras unos minutos iniciales de tanteo, el elenco visitante empezó a mirar de cerca la meta defendida por Facundo. Una buena internada por la derecha acabó en un centro de David que Fran Núñez remató de primeras, aunque sin sorprender al cancerbero local. El Mar Menor respondió en el minuto doce, con un disparo, tras recorte previo, de Vázquez que se estrelló en el lateral de la red. Más tarde el equipo norteafricano generó peligro, en una acción muy parecida a la primera pero por el otro costado, con centro de Ali y tiro desviado de José Antonio. Ese arranque no tuvo premio y el Mar Menor encontró el 1-0 en el minuto 19. Vázquez firmó un soberbio golazo con la zurda, en un tiro con efecto que no pudo sacar Pol Ballesté. Pero el portero iba a desquitarse sólo unos minutos después. El colegiado apreció penalti en un ‘emparedado’ de David y Vargas a Loren, y dejó a Ubis la opción de anotar el 2-0. El delantero eligió lanzarlo al estilo Panenka y Pol Ballesté no se tragó la finta.

El Melilla pudo haber cambiado completamente el curso del encuentro poco después, porque cuando sólo había pasado medio minuto del penalti errado, Borja López estrelló un disparo en el palo desde la frontal, tras dejada de José Antonio. La jugada acabó en un saque de esquina que remató en escorzo Del Campo, aunque Facundo atrapó adecuadamente. Los pupilos de Manolo Herrero agudizaron su presión y Fran Núñez también probó suerte con un disparo combado que salió por encima del larguero.

El partido era bonito y con alternancia en el juego. El equipo local también buscó ampliar distancias, sobre todo en un tiro de interior de Silvente que no encontró la portería por poco. Pero el Melilla hacía más por el gol y Del Campo lanzó una buena falta desde el balcón del área que paró Facundo. Más clara aún fue la ocasión justo cuando se cumplía el minuto 45, en un tiro de David que rozó el guardameta para enviar a córner.

La segunda mitad arrancó con otra fase de estudio entre los contendientes, que rompió el Mar Menor con otro golazo. En una falta lateral por la parte derecha hacia el área apareció el central Javi Ramírez para enganchar un remate acrobático de volea al fondo de la red. El tanto fue un jarro de agua helada para el Melilla, que dejó de tener la presencia ofensiva de la primera parte. Manolo Herrero buscó la reactivación con las entradas de Momodou, David Sánchez e Iker Hernández, con una variante en el sistema más ofensiva, aunque la ocasión más llamativa de esa fase fue anfitriona.

Pol Ballesté tuvo que aparecer ante Titi, una de las permutas locales. El cuadro norteafricano buscó el recorte en algún saque de esquina, pero el Mar Menor se defendía con mucho orden y apenas sufría, sin tener ni siquiera que atacar salvo en algún contragolpe esporádico. Herrero tiró de Sergio y Parla como últimas sustituciones, pero su presencia en la zona de ataque era prácticamente nula.

Así murió el encuentro, con un Melilla claramente de más a menos, que, prácticamente, desapareció tras el segundo tanto. Son ya siete desplazamientos sin victorias y una tercera jornada sin ganar.