Dos fallos condenan a un más que digno Melilla en Mérida

Mérida: José Andrés; Felipe, Bourdal (Elo, min. 92), Bonaque, Raúl Prada; Acosta, Ismael (Busi, min. 55); Raúl Beneit, Álex Escardó (Ben Hamed, min. 69), Sandoval (Borrella, min. 92); y Chuma (Jorge Padilla, min. 55).

Melilla: Salcedo; David Hernández (Yuste, min. 90), Moi, Caro, Dani Martín (Marchena, min. 83); Alberto, Cotán (Vinicius Tanque, min. 59); José Antonio (Gnali, min. 83), Sergio Pérez, Dani García; y José Enrique (Siddiki, min. 46).

Árbitro: González Páez (Comité andaluz). Mostró cartulina amarilla a Raúl Beneit, Felipe, Acosta, Sandoval y Bourdal, todos ellos del Mérida.

Goles: 1-0, Salcedo en propia meta (min. 37). 2-0, Sandoval (min. 54).

Campo: Romano José Fouto. 2.429 espectadores.

Dos patinazos defensivos, tanto de su meta Salcedo como de Dani Hernández, se tradujeron en la derrota del Melilla, segunda del curso, ante un cuadro emeritense que, sin realizar un partido digno de alabanza, aprovechó dichas circunstancias para llevarse los tres puntos y encaramarse en el pelotón de cabeza de la clasificación. Tras el autogol del meta del cuadro azulino en el primer acto, Sandoval, al inicio de la segunda mitad, hizo el tanto que dio serenidad e hizo vivir de las rentas a los chicos de Rai Rosa.

En una matinal espléndida en lo climatológico, el cuadro caballa cambió la defensa de tres centrales a una línea de cuatro zagueros, con David Hernández y Dani Martín en los laterales. La primera vibración no se hizo de rogar y casi cumplidos los tres minutos un centro lateral de Sandoval lo capturó Chuma, que remató cruzado a la derecha de Salcedo. El primer acercamiento de los chicos del conjunto de Miguel Rivera llegó a los cinco minutos, en un saque desde la esquina que solo quedó en anécdota. Ambas escuadras iban tomando posiciones, pero viendo de lejos las áreas. Un tiro exterior de Álex Escardó a los siete minutos y poco más. Fuerzas más que parejas y un Melilla que iba creciendo en el juego con el paso del tiempo. Probó fortuna el ariete José Enrique en un disparo sin potencia tapado por José Andrés al filo del cuarto de hora.

El Mérida intentaba montar alguna contra, pero el orden del Melilla, tanto en la medular como en la zona defensiva, dejaba todo en ascuas. La mejor opción del cuadro azulino la cocinó el mago de Puente Genil, José Antonio, que botó un saque de falta que no peinó con la puntería precisa Dani García en el minuto 25. Era el turno del once local, que gozó de unos minutos llenos de brillo y remates, destacando uno lleno de maldad de Álex Escardó, que se fue por poco, y un testarazo de Ismael a la salida de un córner a diez minutos de sonar el silbato del intermedio. Sufría horrores el cuadro de Miguel Rivera en cada centímetro del escenario. Fruto de ello, le llegó el mazazo justo. Felipe se perfiló desde el banderín y su centro al primer palo contó con la complicidad del meta Salcedo, que despejó de forma aciaga colando el cuero en su portería. El gol animó aún más al equipo emeritense, que disfrutó de una buena opción en un doble remate de Álex Escardó a tres minutos del descanso antes del remate a bocajarro de Dani García que dio paso al descanso preceptivo.

Urgía darle un giro al equipo y Miguel Rivera buscó cambiar las cosas con Siddiki, que se situó en la banda izquierda, colocando a Dani García como punta de lanza. Siddiki dio chispa a los suyos y no tardó en hacer una de sus diabluras en el área. Su servicio buscando el remate de Dani García solo halló la respuesta de la zaga. Apretaba, y mucho, el Mérida, llevado en volandas por un animoso público, y pronto cantó bingo. La zaga de la escuadra azulina, bien cementada hasta ese momento, se deshizo en un fallo de cobertura del lateral diestro David Hernández, que no tapó el avance de Sandoval que, de fuerte chut desde el área chica, subió el 2-0 al tanteador a los nueve minutos de empezar la segunda entrega. A raíz del segundo gol, el equipo anfitrión no vio peligrar la victoria. El Melilla metió en el césped a Vinicius Tanque, convertido en el principal argumento ofensivo.

Un disparo de Álex Escardó fue la antesala de la quizás mejor ocasión del equipo de Rivera en todo el choque. La firmó Vinicius Tanque, pero José Andrés tapó el latigazo. Lo mismo que hizo para detener el tiro de Sergio Pérez minutos después. Cuando restaban trece minutos para la conclusión, Siddiki fue trabado por Bourdal y tuvo que ausentarse casi cinco minutos del campo. Precisó de un vendaje para seguir en el encuentro. El tiempo iba expirando y la entrada de Machena por Dani Martín y de Gnali por José Antonio no solucionó los males de un equipo que dio la cara, pero que terminó pagando la falta de experiencia ante un equipo de mayor empaque y que no perdonó los dos despistes defensivos de la formación caballa para llevarse los tres puntos.