El diputado del Partido Popular (PP), Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, expresó este lunes su desacuerdo con que las personas que rezan en la puerta de diversas clínicas para mostrar su disconformidad contra el aborto sean incluidas como figuras delictivas dentro del Código Penal.
El único representante de Melilla en el Congreso de Diputados comentó en rueda de prensa que el Partido Socialista ha presentado un anteproyecto de Ley de reforma del Código Penal, que está en trámite ahora mismo, "para establecer una nueva figura delictiva que consiste en coaccionar a las personas que van a ejercer el derecho de la interrupción voluntaria del embarazo".
Al respecto, el diputado del PP recordó que este 28 de diciembre, "como ocurre hace más de siete años, se concentra en una de las clínicas de interrupción voluntaria del embarazo más activas de Madrid una plataforma que se autodenomina ProVida" para oponerse a dicha práctica.
Díaz de Otazu adelantó que su partido se ha opuesto al mencionado anteproyecto por considerar que "la coacción de personas para evitar que ejerzan algún derecho ya está contemplada en el Código Penal actual. No tiene sentido incorporar una figura delictiva nueva para lanzarla contra estos grupos que se reúnen delante de estas clínicas a rezar".
A eso, el diputado añadió que "respetamos el derecho de estas personas a mostrar su disconformidad con el aborto y creemos que generar nuevos delitos que pueden ser interpretados como 'estar cerca de alguien que va a cometer una acción que a nosotros nos disgusta', nos conduce por una deriva autoritaria tremendamente peligrosa".
Según puntualizó Díaz de Otazu, si se tratara de coacciones y así lo considera un tribunal, "pues ya está recogido así en el Código Penal. Si el Código no las considera coacciones o prevenciones al ejercicio de un derecho, pues no lo son". Y concluyó: "Consideramos que es un paso más en la limitación o la restricción de derechos para favorecer una postura ideológica".