Un joven de 20 años y nacionalidad marroquí fue detenido el pasado día 20 de este mes de junio cuando circulaba por la ciudad con casi un kilo de hachís adosado a su cuerpo, según han asegurado fuentes oficiales de la Jefatura Superior de Policía. La localización del individuo se produjo de madrugada y a través de unos de los controles de seguridad que monta de forma aleatoria la Policía Nacional.
Fue sobre las 02:15 horas del pasado jueves cuando tres indicativos policiales del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla se encontraban realizando un control de seguridad específico de prevención de la delincuencia de vehículos y personas en la Avenida de Europa. Entonces, observaron cómo un individuo que se acercaba caminando hacia el control, al percatarse de la presencia policial, realiza un cambio brusco de dirección para eludirlo.
La actitud de este persona resultó sospechosa para los funcionarios actuantes por lo que uno de los radiopatrullas se dirigió hacia él para identificarle, ocupándosele en el cacheo superficial que se le realizó 10 placas prensadas de hachís que portaba sujeta a su cuerpo debajo de una faja, por lo que fue inmediatamente detenido. Una vez pesadas las placas, arrojaron un peso total de 990 gramos.
El detenido de 20 años de edad, nacionalidad marroquí y sin detenciones anteriores, pasó a disposición judicial a la mañana siguiente por un delito contra la salud pública.