La ‘redada’ en esta red social puesta en marcha a finales de enero ha permitido abrir 1.300 investigaciones contra el tráfico de estupefacientes en todo el país. La Policía Nacional ha recibido más de 1.500 mensajes de denuncia y ha abierto 1.300 investigaciones contra el tráfico de drogas desde que a finales del mes de enero pusiera en marcha una ‘redada’ en Twitter que, de momento, se ha saldado con dos detenidos y varios puntos de venta de droga desmantelados. data-original-string="qlGZ9eNlu8PHJbS20x616XPwR/AOFWJsUFkR1Tfi2YY=" class="apbct-email-encoder" title="This contact has been encoded by Anti-Spam by CleanTalk. Click to decode. To finish the decoding make sure that JavaScript is enabled in your browser.">an*******@po*****.es
Según la Policía, las unidades periféricas antidroga tienen abiertas cerca de 600 investigaciones en toda España, y otros 700 correos están siendo analizados por la Brigada Central de Estupefacientes y están aportando “datos significativos” vinculados al narcotráfico a gran escala.
Tres ejemplos de las operaciones policiales iniciadas gracias a la colaboración ciudadana en la ‘tweetredada’ de la Policía se han registrado en Melilla, Mérida y Parla (Madrid).
Según ha informado la Policía, en Melilla se ha desmantelado un punto de venta de droga en la barriada de la Constitución y se ha detenido a un joven de 26 años dedicado al menudeo de distintas sustancias estupefacientes. Al arrestado se le han intervenido envoltorios de hachís preparados para su venta, decenas de comprimidos de sustancias psicotrópicas como Clorazepato, Dipotasio, Alprazolam y Clonazepam, y varias básculas y útiles para la distribución y embalaje de la droga.
Gracias a las denuncias recibidas en la dirección
También se ha localizado un bar de copas de la localidad madrileña de Parla donde se vendía cocaína y marihuana. La Brigada Central de Estupefacientes ha sido la encargada de atender con la máxima confidencialidad las informaciones recibidas en la primera ‘tweetredada’ a través de su perfil en Twitter (@policia) y en el resto de sus cuentas en las redes sociales.
Después de un análisis minucioso, se ha comunicado a las unidades periféricas aquellos datos que puedan ser relevantes para una investigación. De los 1.500 mensajes recibidos, 200 han sido descartados al no aportar ninguna información veraz o contrastada. El resto ha servido para iniciar diversas investigaciones, algunas de las cuales aún continúan abiertas y podrían ofrecer resultados en las próximas semanas. Otras han servido para reforzar las pesquisas que ya venían realizando los agentes.