El presidente de Proyecto Melilla (Promesa), Jesús Delgado, está estableciendo un calendario de prioridades en las actuaciones de la sociedad que preside, con el objetivo de poder llegar a todo el tejido económico y productivo de la ciudad.
Delgado está convencido de que “la acción cercana debe ser una máxima de obligado cumplimiento en Promesa, porque en ocasiones nos enrocamos en grandes proyectos y grandes presupuestos, olvidándonos de esa economía pequeña que también necesita de nuestra ayuda y atención”.
Es por eso por lo que Jesús Delgado cree que una de las decisiones más importantes que debe tomar el Consejo de Administración de Promesa debe ser “acercar las ayudas a todas las pequeñas y medianas empresas de la ciudad, así como a todos los autónomos melillenses, desempeñen la actividad económica que desempeñen”.
Sin ir más lejos, Jesús Delgado ha informado de la propuesta sobre la que se trabajará en las próximas semanas desde Promesa relativa a ayudar a pequeños autónomos.
“Hemos detectado que hay por ejemplo pequeños hosteleros que no pueden renovar neveras o máquinas necesarias para su actividad. Empresarios de otros sectores, que no pueden mejorar sus instalaciones o medios para dar mayores y mejores servicios”, ha explicado el presidente de Promesa, quien cree que “con unas mínimas ayudas que se les puedan conceder, van a poder mejorar y mucho sus prestaciones y servicios, repercutiendo tanto en la calidad de sus prestaciones, como en sus resultados económicos”.
Jesús Delgado asegura que con este nuevo paquete de ayudas sobre el que trabajará Promesa “conseguiremos llevar ayudas a decenas de pequeños empresarios y autónomos de la ciudad, que nunca antes se habían beneficiado de ningún tipo de ayudas públicas”.
Trabajo en Promesa
El pasado 13 de agosto el presidente de Promesa, Jesús Delgado Aboy, explicó cuáles son los puntos más destacados en los que debe trabajar esta entidad: la creación de un nuevo centro tecnológico para hacer de Melilla una ciudad tecnológica; llevar la formación a la demanda real de las empresas para que el 75% de los alumnos de esos cursos obtengan un contrato; y facilitar ayudas lo más directas posibles y simplificadas a las empresas antes de final de año.
“Una Melilla tecnológica. Creo que es nuestro futuro y la necesidad más imperiosa que tenemos ahora mismo”. Aseguró el presidente de Promesa que indicó que ha estado tanto en Ceuta, como en Málaga, donde se cuenta con centros tecnológicos con una gran capacidad.
Pero su objetivo es construir en Melilla un centro tecnológico nuevo, más grande y capaz de atraer a empresas. De hecho, su deseo es que se puedan emprender líneas de negocio diferentes a las de Ceuta y Málaga para ser un referente a nivel nacional e internacional. No obstante, apuntó que se tiene que aprovechar el centro tecnológico que ya hay construido en Melilla. Aunque reiteró que hay que adoptar un nuevo sistema de trabajo en este aspecto.