“Darme a conocer en el mundo de la moda es algo que siempre he querido”

Jesús Avellaneda comenta en ‘El Faro’ sus primeras impresiones tras haber sido elegido como Mister Melilla 2011 en una gala que se celebró el pasado sábado.

Jesús Avellaneda tiene 22 años y el pasado sábado fue elegido Mister Melilla 2011 en una gala celebrada en el Auditorio Carvajal y que estuvo inspirada en la mágica noche de San Juan. Este joven melillense comenta en ‘El Faro’ sus primeras impresiones, su experiencia durante los cinco días previos a  la celebración del certamen y las ilusiones que ha puesto en este título.  
Trabaja en el regimiento de Caballería en Melilla y le apasiona el fútbol, la música, el cine y la moda. En este sentido, cree que su fuerte y donde puede rendir mejor su trabajo en la industria de las tendencias es en la pasarela.
Dos días antes de la gala de Miss y Mister Melilla 2011, ‘El Faro’ hizo una breve entrevista a los candidatos. Avellaneda contaba con el número tres y explicaba a este medio que la experiencia le estaba resultado muy positiva y que todos sus compañeros tenían cualidades para llegar a obtener el título del más guapo de la ciudad.  
Jugar al fútbol, otra de sus aficiones, ha tenido un gran peso en su vida, pues ha estado en tercera división, entrenando con el Melilla Segunda B, con la selección de española de fútbol playa y también con las selecciones autonómicas de fútbol, fútbol sala y fútbol playa.
“He dedicado mucho tiempo a él, aunque ahora lo voy a dejar de lado un poco, porque entre el trabajo y ser Mister no voy a poder con más”, indicó Avellaneda.
–¿Qué le animó a presentarse al certamen de Mister Melilla este año?
–Llevaba varios años que me quería presentar, pero como soy un poco vergonzoso no lo había hecho aún. Mi familia, en especial mi hermana y mi novia, me dieron el empujoncillo.
–¿Cómo ha sido la experiencia de haber participado en esta edición?
-Ha sido una semana de preparación. Conocí a Manuel cuando entregué la documentación para inscribirme y a Eva la conocí el lunes 1 de agosto junto con el resto del equipo de organización del certamen, y muy buen con ellos. Se han portado muy bien con nosotros y nos han aguantado (Manuel y Eva son los pricipales organizadores del certamen en Melilla).
–Durante los ensayos de la gala conocieron a la Miss y Mister del pasado año, ¿qué consejos recibió de Felipe Arquero?
–Felipe me ha ayudado mucho. Me ha dado muy buenos consejos. No lo conocía de antes, sino el tercer día de ensayo. El mejor consejo que me dio fue que fuera yo mismo, que no quisiera ser alguien que no soy.
–¿Qué actividades han sido más complejas durante esta semana de ensayo? ¿Y en la gala?
–La primera coreografía de introducción nos costó un poco a todos, sobre todo, a los chicos, que estábamos con el paraguas muy perdidos. Un día salimos de madrugada, pero al día siguiente lo hicimos bien para poder salir antes. Pero en realidad tampoco había mucha complejidad, porque los pasos eran sencillos. La parte más complicada fue la entrevista que nos hicieron a los finalistas. Al final salió bien, pero tenía muchos nervios.
–¿Habido buen ambiente entre los participantes de este certamen?
–Con ellos muy bien. Sólo conocía a José Antonio Pérez, aunque el resto me sonaba de vista, porque en Melilla casi todo el mundo se conoce. Nos llevamos muy bien. Me llevo muy buenos compañeros  de este certamen.  
–¿Cuáles eran sus sensaciones antes de subir al escenario en la gala del pasado sábado?
–Al principio muchos nervios en el camerino. Luego comenzamos a hablar y se iba pasando el tiempo, hasta que se acercó el momento de salir que volví a estar nervioso. Después del primer pase ya estuve tranquilo. Me dije que tenía que ser como yo soy.
–¿Qué sintió cuando escuchó que era uno de los seis finalistas de este certamen?
–Me sentí muy contento. Me lo podía esperar como otro de mis compañeros, porque todos queríamos escuchar nuestros números. Cuando lo escuché sentí tranquilidad, pero luego en el escenario la presentadora nos dijo que nos iba a hacer una pregunta y volvía a sentir nervios.
Sabíamos que iban a preguntar eso, y con los nervios no pude preparármelo de memoria, tan sólo me sabía unas pautas.
–Además, fue nombrado Mister Elegancia por parte del jurado.
–No me lo esperaba, como tampoco esperaba ganar. Ese premio es importante y lo otorga el jurado que valora el porte y otras cualidades. En cuanto al certamen, estábamos más o menos empatados, y cuando dijeron mi número no me lo esperaba.
–¿Qué espera de este certamen?
–Es algo que siempre he querido, darme a conocer en el mundo de la moda. Sé que cuesta y es muy difícil dar el salto, sobre todo desde Melilla, pero trabajando y si se dan bien las cosas puede salir.
–Hay gente que opina que los jóvenes que se presentan a los certámenes de belleza son guapos pero que no tienen nada en la cabeza, por lo que no merece la pena participar en este tipo de galas.
–Merece la pena participar en ellos. A mí me ha venido bien y de cabeza hueca nada, no porque nos consideren guapos no vamos a ser unas personas cultas e inteligentes. No tiene nada que ver.  
–¿Cómo se tomó la familia que ganara Mister Melilla 2011?
–Me apoyaron todos. Mi padre que era de abstenerse en este aspecto lo veía de otra manera, pero al final está muy contento. Todos, mi hermana, mi novia me han apoyado.
–¿Qué se espera de Mister y Miss Melilla 2011?
–Tenemos que dar buena imagen de Melilla. Hay que trabajar mucho. Además, creo que podemos hacer cosas buenas y vamos a comer un día con las personas mayores de la ciudad.
–¿Cuáles serán las primeras actividades que realice como Mister Melilla 2011?
–La primera será en la Semana Náutica que amadrinaremos un barco. Luego estaremos en la inauguración de la Feria.  
–Además, la revista Zoom Melilla les ha ofrecido el poder realizar un primer trabajo profesional como modelos.
–Será una sesión de fotográfica que realizaremos en el mes septiembre para la revista que sale publicada en octubre.  
–¿Cree que ganar este certamen de Mister Melilla 2011 le cambiará la vida?
–No lo sé, pero siempre me ha gustado este mundo y ahora que tengo una oportunidad, quiero aprovecharla.