El sindicato CSI-F, desde su Área de Seguridad Privada, solicita al Gobierno central y local que, a raíz de los atentados de París que dejaron 129 muertos y del nivel de alerta 4 que hay actualmente en España, los vigilantes reciban formación obligatoria por medio de las empresas en materia antiterrorista.
Además, desde la organización abogan por una mayor y más fluida comunicación e intercambio de información con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Para ello, piden equipos de transmisión conectados con estos agentes.
Por otro lado, CSI-F exige que se obligue a las empresas de seguridad a dotar a sus vigilantes de las herramientas necesarias, como pistolas eléctricas, sprays de defensa o chalecos antibalas, para poder efectuar su labor con seguridad, “como mínimo en aquellas instalaciones susceptibles de contener una mayor aglomeración de personas”.