CpM dice que las bajas ofertas de las navieras son una “tomadura de pelo”

Mohatar pide que el dinero que sobre del contrato se destine a  la línea de Motril, como ya propuso el PSOE

El diputado de Coalición por Melilla (CpM) Hassan Mohatar aseguró ayer que da la sensación de que las navieras han estado jugando con el Gobierno a juzgar por las ofertas que han presentado al último concurso para el contrato marítimo. Mohatar consideró una buena noticia que se haya desbloqueado la adjudicación del servicio, porque reconoció que la paralización del contrato perjudica a todos los melillenses. Sin embargo, el cepemista se mostró sorprendido ante el hecho de que las compañías hayan presentado unas ofertas tan bajas, cuando en un primer momento se dijo que el concurso había quedado desierto porque a las navieras no les interesaba económicamente.
“Parece una tomadura de pelo que pudiera adjudicarse el servicio a Acciona Trasmediterránea por 7,6 millones de euros, que es menos que lo que se pagó por el actual contrato”, apostilló el diputado del principal partido de la oposición que insistió en que no tiene sentido que si las navieras podían presentar ofertas tan bajas, llevemos más de un año sin un nuevo contrato. “Las navieras han jugado con los intereses de los melillenses”, lamentó el diputado, que se mostró confiado en que en los próximos días se conozca el nombre de la empresa adjudicataria.
Hay que recordar que las ofertas presentadas por las navieras al nuevo contrato marítimo son de 7,6 millones de euros la de Acciona Trasmediterránea, 14,1 millones de euros la de Balearia y de 17 millones de euros la de Armas, según confirmó en declaraciones a El Faro el presidente del Patronato de Turismo, Javier Mateo.

Defensa de la línea de Motril
Por otro lado, Mohatar criticó que el Gobierno local no haya apoyado la permanencia de la línea de Motril en ningún momento. El cepemista dijo que, independientemente de que la Unión Europea (UE) pueda o no permitir que se declare esta línea de interés público, el Ejecutivo de Juan José Imbroda podría haber buscado alternativas para garantizar que se siga prestando un servicio que ha tenido muy buena aceptación por parte de los ciudadanos. “Si Armas fue la niña bonita del Gobierno local cuando empezó a funcionar en Melilla, entiendo que tendría que haberse luchado más por mantener la conexión con Motril”, apostilló.