Los hechos ocurrieron el 24 de diciembre de 2009, cuando A.M.M. atacó a un celador con un extintor. Ha sido declarado culpable de un delito de atentado. El Juzgado de lo Penal Número 1 de la ciudad autónoma ha condenado a un año de prisión a la persona que agredió a un celador del Hospital Comarcal el 24 de diciembre del año 2009 como autor de un delito de atentado, según informó en la jornada de ayer la Dirección Provincial del Ingesa mediante una nota de prensa.
Los hechos sucedieron a las 6:20 horas de la madrugada del citado dia, cuando el condenado, que responde a las iniciales A. M. M., se encontraba en el Hospital Comarcal, esperando a ser atendido por el personal sanitario cuando, sin motivo alguno que lo justificase, se dirigió a un celador y comenzó a insultarle con frases tales como “te voy a matar hijo de puta, eres un cabrón”.
Según señala la sentencia, el condenado, “acto seguido y con la intención de atentar contra el principio de autoridad, cogió un extintor que se hallaba en el Hospital Comarcal y esgrimiendo el mismo se abalanzó sobre el celador e intento agredirle, oponiéndose a ello la víctima. El extintor provocó que su cabeza impactara contra la pared, ocasionándole lesiones”.
Como consecuencia de la agresión sufrida, el celador tardó en reponerse 45 días y estuvo quince de ellos incapacitado para realizar sus tareas profesionales habituales. Asimismo, en la sentencia se recalca que “los hechos declarados probados son constitutivos de un delito de atentado previsto y una falta de lesiones”.
Durante el juicio oral, el agresor, con asistencia de su letrado, aceptó tanto los hechos como sus consecuencias jurídicas, de acuerdo con lo solicitado por el Ministerio Fiscal.
Por el de delito atentado se condena al agresor a una pena de un año de prisión con inhabilitación especial del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena.
Por otro lado, por la falta de lesiones el castigo es una multa de un mes a razón de seis euros diarios con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago de un día de privación de libertad por cada dos cuotas impagadas.
Asimismo, se ha condenado al agresor a indemnizar al celador al que hirió con 3.000 euros y al pago de las costas del proceso judicial que acaba de concluir.