Comerciantes en contra del cierre a las 22:00 horas: “Vamos a la ruina”

Los comerciantes de pequeñas tiendas de alimentación se han quedado sin palabras con la nueva medida que se adoptó en entre las medidas contra la Covid-19: el cierre de los comercios pequeños a las 22:00 horas. Uno de ellos, que tiene su tienda en El Rastro, aseguró que es a partir de esa hora cuando pueden hacer más ventas porque es cuando cierran ya los grandes supermercados. Aseveró que van “a la ruina”.

Mohamed Abdelkader, desde su tienda en El Rastro, explicó a El Faro que había hablado con más comerciantes como él de la zona y del barrio del Real. Aseveró que les afecta y mucho que se restrinja de esta forma el horario de venta para ellos.

Abdelkader comentó que son a esas horas cuando las tiendas de barrio pueden hacer más caja. Si alguien olvidó comprar tomate frito o se quedó sin fruta va a la tienda de barrio a esas horas y coge los cuatro productos que necesita. Los comercios que están abiertos a partir de las 22:00 horas son ellos, las tiendas pequeñas de los barrios y son las que solventan estos olvidos de las familias. Si a esa hora tienen que cerrar, no podrán dar solución a esos problemas de las familias ni podrán hacer caja. Los grandes supermercados están todo el día abiertos de forma continua y su oportunidad de venta empieza a esa hora.

Se pregunta por qué “se castiga así al sector”. Cuestiona a las autoridades si es que ha habido contagios a esas horas en las tiendas para tomar una medida de este calibre que les perjudica tanto.

Abdelkader aseveró que en las tiendas pequeñas de barrio no hay forma de contagiarse porque apenas caben un par o tres de clientes. Subrayó que es “injusto”.

Además, nada más conocer esta medida, este comerciante, ha apelado a la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) para que interviniera en este asunto, pero le han asegurado que ya es una orden firmada que no tiene vuelta a atrás para ellos.

También, junto a otros comerciantes, ha pensado en solicitar que su negocio sea de 24 horas, es decir, contar un permiso especial como estos otros establecimientos. Sin embargo, no hay forma de coger una cita porque nadie coge el teléfono en la Administración local.

Medidas extremas

Por otro lado, se pregunta por qué no se adoptan medidas estrictas por las zonas en las que entran los casos con coronavirus, es decir, en el puerto y en el aeropuerto. Se preguntó por qué tiene que pagar el comercio minorista de alimentación cuando es en otras instalaciones donde hay esos contagios.

También se cuestionó de qué sirve que su tienda esté cerrada a las 22:00 horas si en el avión que tarda 45 minutos vienen los melillenses unos junto a otros y en el barco tampoco se toman medidas extraordinarias de seguridad. Se pregunta por qué no piden a la gente que viaja que se haga test y les tomen la temperatura, en lugar de bloquear sus negocios.