Los colores oscuros, como marrones, grises y azules, serán las tendencias en ropa masculina durante estos últimos meses del año, además de una clara preferencias por las prendas de ropa más ligera entre los melillenses, según cuentan desde el comercio local Paco Milán.
Atrás queda ya el verano. Con la llegada de octubre, los melillenses comienzan a desempolvar la ropa de otoño. Las pasarelas de la alta moda ya dejaron claro las prendas y colores de la moda masculina durante el último trimestre de 2022.
En Melilla, en cambio, tal y como cuentan en Paco Milán, no hay una tendencia clara y el gusto entre los melillenses varía según distintos factores, como los grupos de edad.
Los más jóvenes suelen ser el sector que siempre está más pendiente de lo que se está llevando y siempre quieren ir a la última moda. Influyen en ello muchos factores, pero, además de las campañas publicitarias de las grandes marcas, las redes sociales como Instagram o Tik Tok ayudan en este tipo de ámbito, pues sirven de escaparate para las tiendas de ropa y los influencers.
También están aquellos que se muestran ajenos a las tendencias. Se reducen a lo que a ellos les gusta, independientemente de lo que dicten las grandes corporaciones o los diseñadores de moda.
El sector más difícil para seguir con las tendencias son los mayores de la ciudad. Prefieren optar por los estilos clásicos y no quieren nada con las nuevas prendas que están de moda. En Paco Milán aseguran que hay clientes que entran buscando algo en específico, sin importar “que se lleve” o no porque se lo van a llevar igual. Es un perfil muy decidido que sabe lo que está buscando.
Aunque el otoño ya ha llegado, en Melilla los termómetros todavía se mantienen altos. Mientras que en otras partes de España ya están sacando prendas que abriguen más, desde este comercio melillense explican que en la ciudad no hacen falta prendas tan gruesas durante estas fechas.
Desde Paco Milan señalan que ahora es cuando la gente comienza a llevar alguna cazadora o chaqueta fina, pero nada muy grueso. “Los jerseys gruesos dejamos de venderlos hace años”, porque en Melilla basta con un jersey fino y más ligero.
Mario es un joven melillense que cuenta a El Faro que él siempre lleva camisetas de mangas cortas y encima una chaqueta fina. Es la opción más cómoda y la mantiene durante estos meses.
“Todavía hace calor”, comenta Francisco García de Paco Milán. “Cuesta trabajo saltar de la ropa de invierno a la de verano”.
En Melilla asegura que lo que más suele llevar la gente es una camisa o un polo y encima una chaqueta. En definitiva, “prendas que te puedas poner y no te pesen luego mucho en la mano”.
El verano se caracteriza por la viveza de sus colores: son más alegres y vibrantes. El invierno, en cambio, da paso a una paleta más fría y oscura. El otoño, al encontrarse a medio camino entre ambos, fusiona ambas paletas.
Desde Pantone anunciaron que los colores tendencia de esta temporada serían aquellos que transmiten calma y comodidad a la vez que impulsan la vitalidad con tonos relajantes, como el rosa violeta, el color café o el caramelo.
Sin embargo, en Melilla cada cliente se tiñe a los colores que más le gustan o los más cómodos, aunque estén alejados de lo que dictan las grandes marcas de diseño. Y es que, tal y como dice el refrán, “el libro de los gustos está en blanco”.
David es otro melillense que se considera “clásico”. Lleva utilizando y combinando los mismos colores durante años; son los que mejor le sientan, los que más le gustan y ya, a su edad, no piensa cambiarlos. “Siempre me gustan los mismos y no cambio de color”, apunta.
En Paco Milán explican que esto es muy habitual en clientes que ya tienen cierta edad porque llevan toda la vida vistiendo con los mismos colores y, da igual lo que “se lleve”, que ellos van a seguir comprando lo mismo. “Es difícil que se acostumbren a algo nuevo”, señalan desde la tienda local.
Pero, a pesar de que los jóvenes sí suelen ser más concretos y buscar las nuevas tendencias, los colores básicos siguen ganando la apuesta a las más innovadoras.
Juan, por ejemplo, opta más por los marrones o los grises porque “los colores vivos no me pegan mucho, aunque dicen que me sientan bien”. Mario, por otro lado, siempre tiene en su armario prendas blancas o negras, porque se considera bastante “monocromático” y son sus colores por excelencia.
Desde Paco Milan aseguran que algunos clientes jóvenes, nada más entrar, piden ropa negra. En cambio, las personas mayores buscan los colores por su alegría y viveza. Todo depende de gustos y de la perspectiva de vida.
Otro factor a tener en cuenta es que los estampados siguen manteniéndose en las prendas masculinas, como las chaquetas de cuadros, pero los colores lisos y básicos siguen aguantando porque son esenciales.