La fiesta del sacrifico de acerca, y aún bajo pandemia, son miles los melillenses que no quiere quedarse sin su borrego para sacrificarlo. Así lo han demostrado las imágenes de las colas formadas en las puertas de uno los cebaderos de ciudad. En la puerta se agolparon decenas de hombres y algunas mujeres, algunos habían ido en coche, para hacer su encargo y ciertos afirmaron que han acudido con cita al lugar.
Por el contrario, personas como Karima han decidido encargar medio borrego al carnicero. Ella lo va a comprar con una amiga y se preguntó "¿para qué quiere un borrego entero?", por lo que no acudirá a los cebaderos de la ciudad a por uno.
En la mañana, el consejero de Economía y Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand, explicó que hubo un retraso en la llegada de borregos por asuntos administrativos, pues para traer a los animales, hay que cumplir una serie de requisitos sanitarios. Además, anunció que la próxima semana se reunirá con los cuatro ganaderos autorizados de la ciudad y ofrecerá una rueda de prensa para tratar asuntos relacionados con la fiesta del sacrificio, como el precio del borrego y cómo se va a desarrollar este verano la festividad.
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