“El regreso del guerrero”. Así se podría titular la vuelta del legendario ex capitán de la UD Melilla a los terrenos de juego. Su sola presencia sirvió para que el equipo que dirige Paco Carmona ofreciera una imagen bien distinta a las anteriores. Un equipo serio, organizado, y con un Chota que se movió por todas las partes del campo y que no paró de dar instrucciones a sus compañeros para, al final, tener la recompensada deseada: La victoria.
Una vez llegado a un acuerdo para ayudar al representante melillense en la Tercera División, Chota no tuvo ningún reparo en debutar hace dos semanas y sin apenas entrenar, en un campo complicado y ante uno de los mejores equipos como era el Atlético Mancha Real. Lo de menos fue el resultado. Se trataba de ir cogiendo ritmo de competición. A Chota no se le caen los anillos por jugar en un equipo amateur. Ama al fútbol y alguna vez éste será justo con él.
El pasado sábado Chota debutaba en casa. Afrontaba su segundo partido con la elástica del River Melilla. Un equipo que llevaba más de tres meses sin ganar y anclado en los puestos de descenso. Fue llegar y besar el santo. Chota realizaba un partido muy completo y el equipo sumaba un triunfo merecido. El primero de la “era” Chota y a la vez el primero de la “era” Carmona tras once partidos dirigiendo a la escuadra ribereña en la que solo había logrado un empate.
Las primeras valoraciones de Chota tras saborear las mieles del triunfo con su nuevo equipo fueron las siguientes. “Debutar y ganar en casa, era lo que quería. Da igual marcar o no. Hay que seguir trabajando y apostando por el equipo, porque hay jugadores muy buenos. Ahí está la demostración cuando se les mete caña y se está encima de ellos. Hoy lo han demostrado”, manifestó.
A pesar de llevar muchos meses alejado de la competición, el delantero melillense se encontró bastante bien a lo largo de los 90 minutos que permaneció en el terreno de juego. “La verdad es que me he encontrado muy bien. Lo que pasa es que el terreno de juego es muy reducido, pero hay que acostumbrarse a todo. Siempre he dicho que yo ya vengo de vuelta de la guerra de campos de césped, de tierra y de todo y esto para mí es poco”, aseguró Chota.
El rival de los melillenses no era una perita en dulce. La UD San Pedro es un equipo de mitad de la tabla que cuenta con buenos jugadores en sus filas como demostró en el prime tiempo, aunque tras el descanso el River fue superior y se hizo acreedor a la victoria. “El equipo ha estado un poco nervioso. Todavía nos queda mucho. Estamos en una situación delicada en la clasificación y nos hace falta coger confianza. Creo que la victoria nos va a dar más fuerza para seguir trabajando y mejorando”, significó.
Jugadores de la experiencia del meta Jesús o de Chota se hacen notar ante equipos en teoría superiores. El River Melilla supo mantener la portería a cero con las buenas intervenciones del portero sevillano, además de saber leer el partido en una segunda mitad en la que se mostró con las ideas más claras que su rival. “Era como si tuvieras un clavo metido en el pie. Había que quitarse ese clavo para tener una marcha más. Había que salir un poco de atrás, presionar y sobre todo ganar las segundas jugadas. Eso es clave en campos como La Espiguera. El equipo se ha soltado en el segundo tiempo y ha sido competitivo”, apuntó.
Al término del partido Chota transmitía felicidad y optimismo. Se le veía contento y con una sonrisa de oreja a oreja. “Estoy como un niño con una piruleta. Sigo disfrutando del fútbol y no quiero que nadie me quite la ilusión”, concluyó.