XXLa interesante muestra dijo adiós a Melilla y viajará ahora hacia Villarreal.
La exposición ‘Cerámica rifeña, barro femenino’ que ha acogido estas dos últimas semanas la Sala Victorio Manchón de la UNED, cerró ayer sus puertas para poner rumbo a su próximo destino: Villarreal. Más de 300 personas han visitado esta interesante muestra en la que se refleja toda la historia del pueblo bereber a través de su cerámica. El pasado 12 de mayo la exposición fue inaugurada por las principales autoridades de la ciudad con motivo de la celebración de las III Jornadas de Estudios e Investigaciones del Rif. Desde entonces, una veintena de personas cada día ha visitado la Sala Victorio Manchón y han sido numerosos los grupos y asociaciones y entidades melillenses las que se han interesado por esta muestra.
Un total de 160 piezas de barro y cerámica han transmitido a los melillenses la idiosincrasia de las tribus que vivieron en el Rif y sus tradiciones y creencias milenarias. La exposición se dividió en dos espacios; uno dedicado a la simbología utilizada por las alfareras rifeñas y otro dedicado a los diferentes usos que se le dieron a vasijas, ahumadores y cántaros. Toda una muestra apoyada con un completo material audiovisual, obra de los comisarios de la exposición, María José Matos y Jorge Wagner, que ilustra con sorprendente realismo cómo las mujeres rifeñas elaboran, mediante técnicas de modelado ancestrales, vasijas, cántaros, ahumadores, orzas, cuscuseras, mantequeras y platos, así como la rica simbología que las adornan haciendo de ellas piezas únicas e irrepetibles.
Otros destinos
Y es que cada pieza lleva impreso el alma de las mujeres rifeñas, cuya tradición llega a nuestros días gracias al celo de éstas por conservar sus tradiciones transmitiéndo todo su saber de madres a hijas. Cada pieza es única, pues la orografía marroquí favoreció el aislamiento de unas tribus a otras generando técnicas y decoraciones específicas de cada zona. El denominador común a todas ellas es el modelado a mano, sin torno, y la cocción del barro se lleva a cabo en hornos al aire libre.
La belleza de todas las piezas radica en la sencillez de su fabricación, pues esta labor propia de las mujeres rifeñas únicamente está dirigida a cumplir y satisfacer las necesidades domésticas. No obstante, considerarlas como piezas de arte no sería extraño a tenor de las complejas y elaboradas decoraciones que, a través de incisiones o apliques en la cerámica y dibujos hechos con pigmentos naturales y minerales, imprimen todo su carácter y personalidad. Así podemos encontrar símbolos zooformos como la serpiente o la rana, decoraciones triangulares, motivos vegetales o antropomorfos, reticulados y ajedrezados.
La comisaria de la esposición, María José Matos, adelantó a ‘El Faro’ que en las próximas semanas se concretará la siguiente parada de esta muestra en la ciudad de Villarreal y, más adelante, visitará Argentona.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…