La CEME pide agilizar el pago de las deudas a las pequeñas empresas

El presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME), José Reyes, pide la elaboración de un reglamento sancionatorio de la Ley 15/2010 para agilizar el pago a las pequeñas empresas.

De acuerdo con Reyes, hay Pymes que esperan entre un año y dos para que las deudas que tienen con ellas sean saldadas. Las empresas se rigen por la Ley 15/2010, que fija los plazos para que los deudores paguen. Según Reyes, en “la gran mayoría de los casos” se incumplen los tiempos de pago.

Dijo que intentan junto con la CEOE elaborar un documento sancionatorio para que las empresas que incumplan con la Ley 15/2010 se les “pueda llamar al orden”.

Aunque no reveló datos sobre Melilla por ser de carácter confidencial, indicó que son muchas las empresas afectadas.

El presidente de la CEME indicó que las Pymes son las grandes perjudicadas, porque no pueden extender por tanto tiempo el cobro de las facturas. Agregó que hay “facturas que se cobran al cabo del año o de los dos años y eso es una barbaridad”.

Recordó que las empresas pequeñas con 10 o 12 trabajadores mensualmente deben hacer frente a los salarios, temas de seguridad social y los gastos, situación que muchos “no se pueden permitir. Hay empresas que trabajan para grandes compañías, casi en exclusiva, y no cumplen la Ley 15/2010”.

De acuerdo con Reyes estas firmas, para estar “dentro de la ley”, emiten un pagaré en el que mencionan que pagarán, por ejemplo, a 240 días, quedando fuera del plazo pero con este documento cumplen con la norma por el vacío legal existente.

Por otra parte, indicó que con la Administración ocurre la misma situación, en que “muchísimas empresas de esta ciudad que trabajan para la CAM o para cualquier otra Administración y tienen el mismo problema”, con facturas que van quedando de lado o pendientes de informes.

Reyes se refirió de manera genérica a la Administración, pero indicó que “las pequeñas empresas no pueden soportar esa carga de facturas pendientes” pues los meses pasan y “a los trabajadores hay que pagarles puntualmente como marca la ley y la Administración se tiene que poner las pilas”.

Agregó que hay empresas pequeñas de la ciudad que, debido a estos retrasos en los pagos, “lo están pasando bastante mal”.

El presidente de la CEME exige la elaboración de ese reglamento sancionatorio de la Ley 15/2010. Este documento estaría en el Congreso de los Diputados y debe ser aprobado. Aunque hay mociones por parte de algunos grupos políticos para que se desarrolle, pero aún no se ha llevado a cabo.

A juicio de Reyes, las autoridades deberían tomar más en cuenta a las Pymes, pues generan el 90% del empleo estable en España.

“Poner orden”

Con la idea de “poner un poco de orden” en el comercio transfronterizo, la CEME está convocando a una reunión el próximo 8 de octubre en su sede. A este encuentro están llamados a participar todos los transportistas, comerciantes y empresarios vinculados a la frontera.

El presidente de la CEME informó de que están apostando por la “defensa del comercio transfronterizo”. Agregó que intentan que “los comerciantes y demás lo puedan llevar”, sorteando las limitaciones para exportar mercancías a Marruecos.

Reyes señaló que han sostenido reuniones previas con Delegación de Gobierno, la Guardia Civil y la Policía Nacional, “y vamos a ver de qué manera podemos colaborar, en medio de esta situación, los comerciantes puedan seguir facturando y viviendo”.

El objetivo del encuentro es reunir a todos los sectores implicados en la problemática, comerciantes, transportistas de las furgonetas de menos de 3.500 kilos, así como los que tienen transporte propio y realizan este servicio, taxis y demás sectores.

Explicó que harán lo solicitado por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que se traduce en “controlar de cierta manera en que los propios comerciantes puedan expedir, sino facturas, por lo menos tique de compra y hacerlo mucho más llevadero de lo que se está haciendo ahora mismo”.

Enfatizó que se trata de “poner un poquito de orden, dentro de gran desorden que hay