La Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) prevé organizar una reunión con la Inspección de Trabajo para analizar con sus técnicos la forma de registrar el horario de los trabajadores en las empresas de la ciudad, sobre todo, en las que hay más complejidad o dudas, como pueden ser las panaderías o el sector de la hostelería.
El presidente de la entidad en la ciudad, José Reyes García, aseguró a El Faro que, en realidad, el problema de registrar los horarios en algunas empresas está en toda España y no solo en Melilla. Comentó que hay muchos tipos de negocios en los que es difícil concretar el horario de entrada y salida de los empleados por diferentes particularidades, por ejemplo, un representante, las empresas que tienen un servicio de 24 horas, los que trabajan con su propio vehículo y un largo etcétera. Explicó que la ley indica que hay que registrar la entrada y la salida, pero hay trabajos y profesiones donde no es tan sencillo determinar esto, como los camareros o los panaderos. “Es complicado y en cada sector hay problemas”, apuntó.
Reyes indicó que esperan que el Gobierno central amplíe un poco más la guía que se ha realizado sobre el tema. No obstante, subrayó que el objetivo de la CEME es reunir a los empresarios de todos los sectores en una gran asamblea.
De esta forma, cada uno podrá trasladar sus dudas o dificultades sobre el control horario. Luego todas estas notas se trasladarán a la reunión que desea concretar la confederación con la Inspección de Trabajo. Sería con los técnicos con los que se podría analizar cada caso, si se puede definir mejor. “De esta manera estaríamos un poco más tranquilos”, añadió.
El presidente de la CEME comentó que en la Confederación Española de Organizaciones Empresariales mantuvieron un encuentro con la directora general de Inspecciones de Trabajo de España que les ofreció unas primeras indicaciones. Ella les aseguró que se iba a tener un poco de margen con las empresas en las primeras semanas de la ley, pero que a partir de julio sí que se iniciarían las sanciones a los negocios que no registren el horario de los empleados.
“Es una iniciativa que está muy bien para aflorar aquellas horas que no pagan las empresas y deberían hacerlo, pero lamento que se haya sacado esta medida sin consensuar con los empresarios el cómo se hace, porque finalmente somos los afectados”, destacó.
Aunque lo curioso de esto es que Reyes aseguró que no tienen ningún correo electrónico ni ninguna petición de empresarios de la ciudad para que les resuelva las duda sobre este asunto. Cree que hay algunos empresarios que aún no están concienciados de que deben recoger ese registro de inicio y finalización del trabajo de sus empleados. Pero también remarcó que hay otras empresas que llevan años con sistemas de recogida de entrada y salida de trabajadores. Apuntó que hay quien tiene un documento por mes en el que el empleado recoge esto, también hay quien tiene un control electrónico por huella o tarjeta.
Con independencia de todo esto, lo que desea plantar a la Inspección de Trabajo son las casuísticas concretas que le expongan los propietarios de negocios en esa asamblea que se convocará.
Este mismo tema salió en la reunión que mantuvo la CEME, junto a los agentes sociales, con la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, hace un par de semanas. Reyes explicó que la ministra les insistió en que la ley busca que los empresarios paguen las horas extra que hacen sus empleados. Aunque el presidente de la CEME argumentó que eso es un aspecto que tiene que controlar la Inspección de Trabajo porque reconoce que no todos los propietarios de negocios cumplen con la normativa.
También indicó que son muchos los empresarios que se han reunido con el representante sindical para determinar cómo se registra la entrada y salida de los trabajadores y han firmado un acta con esta decisión.
Aún no tiene fecha la asamblea con los empresarios, ya que están a la espera en la CEME de se cuente con un Gobierno local en Melilla. Les gustaría abordar en este encuentro no solo el tema de los horarios, sino también cómo están las empresas de la ciudad.
Reyes aseveró que esperan recoger las impresiones de todos los propietarios de negocios de la ciudad, no solo de la frontera, y ver la problemática que tienen. “La ciudad tiene muchas carencias y muchas necesidades. Vamos a necesitar de la ayuda política y eso es claro”, remarcó.
No obstante, el presidente de la CEME subrayó que no paran y que se están reuniendo ya con algunos sectores. De hecho, la semana pasada mantuvieron un encuentro con agentes de aduanas y transitarios. Por un lado, este sector expuso su situación tras el cierre de la aduana comercial de Marruecos con Melilla y la confederación le explicó cuál es su hoja de ruta y los contactos que ya han hecho sobre este asunto.
“Les hemos pedido que nos hagan llegar sus propuestas y se sumen a las reivindicaciones y a las reuniones para que todos, desde un frente común, podamos solucionare los problemas del sector”.
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