Catalá aboga por eliminar las “sombras” en la actuación de los agentes en la valla

El ministro dice que hay que garantizar que guardias civiles y policías trabajen con seguridad jurídica

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, defendió ayer la necesidad de que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado puedan hacer su trabajo con “seguridad jurídica y garantías”. El ministro hizo esta afirmación en referencia a la aprobación del proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana, que incluye una enmienda que permitirá la modificación de la Ley de Extranjería con el fin de legalizar las ‘devoluciones en caliente’. “Uno de los peores servicios que podemos hacer es permitir que para los que trabajan por defender las libertades de todos, los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado, haya alguna zona de sombra de duda que pueda incluso generarles la apertura de un proceso judicial. Estoy convencido de que no hacen otra cosa que trabajar por el interés de todos y por eso tenemos que ayudarles a tener buenas leyes que clarifiquen cualquier duda”, dijo Catalá en relación con el hecho de que varios guardias civiles haya sido imputados tanto en Melilla por sus actuaciones en la valla.
El ministro recalcó que una de las “obligaciones” del Gobierno es facilitar a los agentes herramientas eficaces para que puedan realizar su trabajo con garantías. “La Ley va a aclarar algún aspecto que podía tener alguna sombra de duda o en el que algunos han querido ver dudas cuando se habla de devolución en lugar de rechazo en frontera”, apostilló. El titular de la cartera de Justicia  señaló que no se puede olvidar que se está regulando la entrada en un Estado soberano y dejó claro que esta entrada tiene que estar sometida a unas normas “como es razonable y ocurre en todo el mundo”.
Catalá reconoció que en la frontera de Melilla existe una singularidad y recalcó que por esta razón es necesario tener claro los procedimientos que hay que seguir y “que lo conozcan todos”. Estas reglas, señaló el ministro, tienen que ser conocidas tanto por los ciudadanos que quieren acceder “con normalidad y legalidad” al territorio español  como por los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado “que están para velar por el Estado de Derecho”.

Asilo y frontera
En cuanto a la limitación que puede suponer para el acceso del derecho al asilo la legalización de las ‘devoluciones en caliente’, Catalá dijo que “una cosa es el derecho al asilo, que tiene una singularidad y unas condiciones para ser acreditado y reconocido, y otra cosa es la entrada y salida a territorio nacional”. “Yo creo que la nueva Ley lo que aclara es lo sistemas de entrada de acceso y eso no implica ninguna limitación del derecho al asilo de quien tenga condiciones que justifique tener esa condición”, resaltó.
El ministro también se refirió a las dificultades que tienen los inmigrantes para poder llegar a las oficinas de asilo. “El salto de la valla es una actividad ilegal, infringen el sistema de acceso y por tanto lo razonable es que tengamos sistemas legales que garanticen que los flujos y la entrada de ciudadanos extranjeros en España sea un proceso ordenado y que esté sometido a requisitos y condiciones”, señaló Catalá. El ministro aseguró que como pasa “en todo el mundo”, los accesos a cualquier territorio de un país extranjero tienen que estar sometidos a controles administrativos y de seguridad ciudadana. “Un sistema claro, conocido por todos y sin zonas de sombra”, apostilló. Sin embargo, no aclaró cómo pueden llegar los inmigrantes subsaharianos hasta la oficina de asilo de Beni Enzar ni qué posibilidad tienen los de origen magrebí de hacerlo sin documentación falsa o pagando un soboro a la Policía del país vecino.
El ministro también se refirió, de forma breve, a la necesidad de hacer cambios en la ley del menor para hacer frente a las peculiaridades de Melilla. Aseguró que tras hablar con el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, y la fiscal de menores, se lleva “información” para analizar cómo mejorar la situación en nuestra ciudad.

El ministro dice que la lucha contra la corrupción es posible porque estamos en un Estado de Derecho

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, se refirió ayer a los procesos de lucha contra la corrupción abiertos en nuestro país en los últimos años. Catalá señaló que en la lucha contra la corrupción en general, tanto en Melilla como en el resto de España,  las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, el Poder Judicial y también el Legislativo están haciendo una gran labor. El ministro se refirió a la utilidad de las últimas reformas en materia del Código Penal, aprobada el miércoles en el Senado o a la nueva ley de financiación de partidos políticos. Catalá aseguró que se trata de un conjunto de medidas que van a permitir que jueces, fiscales y Cuerpos y Fuerzas de Seguridad hagan cada vez mejor su trabajo en la lucha contra la corrupción. El ministro señaló que se trata de una demanda de la sociedad a la que hay que hacer frente. Aseguró, además, que los procesos iniciados son una muestra de la que vivimos en un Estado de Derecho y de que las instituciones funcionan. “Por eso estamos conociendo supuestos delitos de corrupción y en su caso sentencias y cumplimiento de condenas”, resaltó. “Debemos felicitarnos por el cumplimiento del Estado de Derecho y el camino para la mejora de las normas que garantice que en España no se tolera la corrupción y la sociedad perciba que tiene unos cargos públicos que en su mayoría son absolutamente honrados y transparentes y cuando no es así se actúa contra ellos”, dijo el ministro de Justicia.