Aulas Culturales para Mayores organizó ayer en el Hotel Melilla Puerto una divertida fiesta de disfraces amenizada por la chispa y el ingenio de la chirigota ‘Las alegres divorciadas’, que dio un repaso en clave de humor a la actualidad local y nacional.
Una clara apuesta por hacerse mayor de forma activa. Así podría definirse el trabajo que lleva a cabo Aulas Culturales para Mayores, un centro dependiente de la Consejería de Cultura que ayer organizó una animada fiesta de carnaval en el Hotel Melilla Puerto.
Amenizada por la chirigota ‘Las alegres divorciadas’, que dio caña a diestra y siniestra con divertidas puyas sobre la política local y nacional, multitud de melillenses disfrutaron de esta actividad, una de tantas que organiza Aulas Culturales durante todo el año.
Este centro imparte una serie de talleres “para personas mayores de 50 años”, explica Juan Carlos Martínez, el director de este centro dependiente de la Consejería de Cultura y Festejos.
“Hay talleres de dibujo y pintura, escultura, alfabetización, idiomas, informática...” continúa Martínez. “El año pasado lo terminamos con 800 alumnos y este previsiblemente lleguemos hasta los 900”, revela el director, satisfecho del “trabajo” y la “energía” de los profesores.
“A lo largo del año hacemos varias fiestas, y la de carnaval es una de las más importantes. La chirigota llevaba ensayando desde septiembre”, destaca Martínez, quien añade que su realización es “totalmente libre”, tanto en las letras como en los disfraces. “Ha sido graciosísima y ha llenado de alegría este salón”. Los rostros divertidos del público que abarrotó la sala le daban la razón.