Categorías: Cultura y Tradiciones

“Cándido Lobera, un emprendedor, que cambió la espada por la pluma”

Dos profesores de la UGR presentan la biografía del fundador de la Asociación de la Prensa de Melilla.

Cándido Lobera fue un hombre que marcó la historia de Melilla desde el momento en el que pisó esta tierra. Así lo aseguró ayer el presidente de la Fundación Melilla Monumental, José Vallés, durante la presentación de la biografía de este militar, escritor, político y periodista que fue el fundador de la Asociación de la Prensa de Melilla. “Cándido Lobera, un emprendedor, que cambió la espada por la pluma”. Así lo definen los encargados de realizar esta investigación, los profesores e investigadores de la UGR, Salvador Gallego y Rosa Marqués.
La biografía de Lobera fue un encargo de la Fundación Melilla Monumental, aunque la entidad que promovió esta investigación fue la Asociación de la Prensa que deseaba contar con esta obra para la celebración de su centenario, que se conmemoró el pasado año. Sin embargo, la investigación de Gallego y Marqués se alargó más de la cuenta porque encontraron mucho material sobre este personaje.
Una de las curiosidades que descubrió al adentrarse en la vida de Cándido Lobera fue hallar en la Granada de principios del siglo XX, su casa. Así lo aseguró Marqués, que apuntó que este militar vivía en el centro y, a pesar de las numerosas reformas de esta zona de la ciudad, aún se conservaba.
Marqués indicó que Cándido Lobera fue un hombre aventurero, como los de su época, que se dejó atrapar por Melilla, pues no quería otro destino que no fuera esta ciudad. Además, en sus escritos, que tuvieron una gran repercusión a nivel nacional, demandaba muchas cosas que necesitaba la población melillense. Se sentía uno de  ellos e incluso fue de los pocos que reclamaba la construcción de una mezquita en Melilla, destacó Marqués.

Escapar a la muerte
Otra de las curiosidades que ha revelado esta investigación es que Cándido Lobera burló en numerosas ocasiones a la muerte. Tuvo accidentes de coche, de tren, de caballo y un polvorín explosionó justo al lado de su cuarto. Sin embargo, lo que le mató fue una enfermedad para la que aún no se había inventado un antibiótico, aseguró Marqués.
Si hay otro dato que destacar de este personaje fue su opinión de que España debía participar en el colonialismo. Era de los que pensaba que el Protectorado de España en Marruecos iba a aportar beneficios al país. Esto también le llevó a ser muy criticado.

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