Noticias

Calvo Sotelo, el barrio con grandes maceteros en las aceras para impedir que los coches aparquen

El barrio de Calvo Sotelo está subiendo escaleras o cuestas desde el Industrial o el Tesorillo. Se trata de un lugar tranquilo, según los vecinos, pero con una característica que llama la atención de cualquiera: sus habitantes ponen grandes maceteros en las puertas de sus hogares para evitar que los coches aparquen sobre la acera. Y es que la falta de aparcamiento es el principal problema que ven los que viven en este barrio y casi el único. Todos coinciden en que se vive muy bien en esta zona de Melilla.

Los grandes maceteros no son cosa de una calle o una casa. A lo largo del barrio se pueden ver en varias ubicaciones. Es una imagen curiosa porque en las aceras donde hay estos grandes maceteros, los vehículos aparcan por debajo del bordillo.

Pero lo cierto es también que la amplitud para que el peatón pase disminuye y no hay mucho margen para el paso de un carrito de bebé o una silla de ruedas. Lo que está claro es que quien tiene el macetero grande situado en la acerca pegando al bordillo impide que los vehículos ocupen ese espacio.

Hay aceras ocupadas en este barrio de forma casi completa por los coches y, solo en los huecos en los que hay esos maceteros, está la acera liberada del vehículo.

Aunque El Faro, caminando por el barrio, pudo ver una estampa aún más llamativa y es la de un todoterreno estacionado entre dos maceteros en la puerta de una casa. En este caso, el periódico desconoce si el coches es del propietario o no de la vivienda, pero, sino es así, está claro que tendrá que acercar los maceteros para impedir que en medio puede estacionar un vehículo.

Pero, ¿qué nos dicen los melillenses sobre Calvo Sotelo? El único problema que ven es la falta de aparcamiento.

Algún que otro vecino, aunque fuera de cámara, comentó a este periódico que por las noches hay una gran acumulación de basura en los contenedores. Y al final, indicaron, acaban las bolsas fuera y todo lleno de porquería.

Y es que algún que otro vecino ve que hay falta de contenedores para este barrio que no para de aumentar en población por el cambio de casas matas en bloques de piso.

Pero también nos cuentan los vecinos que si no hay espacio para aparcar, pues tampoco hay muchos lugares donde instalar los contenedores. Nadie los quiere cerca y muchas zonas del barrio tienen casas mata con lo que les molestaría mucho.

Los vecinos

Miguel, un joven del barrio, aseguró que los vecinos de la calle Auxilio Social encuentran aparcamiento justo en la carretera. Y no ve ningún problema en el barrio.

También Benaisa aseguró que en su calle cada vecino aparca en su puerta y no ve que haya más problemas en este barrio para aparcar que en otros de la ciudad.

Antonio, que también vive en Calvo Sotelo, aseguró que lo único malo del barrio es la falta de aparcamiento.

Para Mohamed, es muy difícil aparcar. Tiene una carnicería en el barrio, muy cerca del Comarcal, y aseveró que cuando llega con la mercancía tiene que dar una y mil vueltas hasta que logra poder estacionar. Afirmó que todas las mañanas tarda entre 15 y 20 minutos en aparcar.

De casas a bloques de pisos

Por otro lado, como ocurre en otras zonas de la ciudad, Calvo Sotelo ve cómo van desapareciendo las casas matas para dar paso a bloques de pisos con muchas viviendas. Aunque no son muchas las plantas de estas nuevas viviendas, supondrá un gran cambio para este espacio de la ciudad y el número de estacionamientos será también cada vez más reducido.

Los vecinos aseguran que es un barrio en el que se vive bien y es tranquilo

“El barrio de Calvo Sotelo es estupendo. Es un barrio muy tranquilo”. Así lo aseguró, María Rosa, que lleva 14 años viviendo en esta zona de Melilla. Ella venía de comprar el pan en una tienda cercana.

Un joven que bajaba del barrio, Miguel, aseguró a El Faro que el barrio es muy tranquilo. Es más, argumentó que el único ruido que se escucha es el de los camiones cuando descargan en un supermercado de una gran superficie que hay cerca de su casa. Alguna noche que otra se escuchan ruidos de personas, pero aseveró que son casos excepcionales.

Eso sí, se ha perdido la relación entre los vecinos que había antaño. Explicó que cada familia va a lo suyo y no se tiene esa vinculación con los que viven cerca. Tampoco hay líos entre los vecinos porque todo el mundo vive en paz, añadió.

Otro de los vecinos, Benaisa, nos dijo que “estamos en una zona muy tranquila y al lado del Comarcal. Se vive muy bien”. Aseguró que todos los vecinos viven bien.

Antonio también es de esta opinión. “Yo aquí vivo muy bien”, aseveró a El Faro. Aunque reconoció que las cosas han cambiado en el barrio, pues desde hace años hay menos relación con los vecinos y cada familia va a más a lo suyo.

Y lo mismo nos cuenta Damiana. Ella nació en la misma casa donde vive desde hace más de 80 años. En la puerta tomaba el sol con el perrito que le deja a su cargo su sobrina. Indicó que se lleva muy bien con los vecinos y que es un barrio muy tranquilo. Aunque subrayó que antes todas las noches se sacaban las sillas para conversar en las puertas con otros vecinos y eso ya se ha perdido.

Menos ventas en los negocios

El barrio no tiene grandes superficies, aunque están muy cerca, pero sí que cuenta con tiendas pequeñas, carnicerías, panaderías, farmacias, el centro de salud no está muy lejos y a un paso está el Hospital Comarcal.

Mohamed es dueño de una carnicería del barrio. Explicó al periódico que la vida en el barrio es muy tranquila. Pero también destacó que se ha notado mucho que se ha cerrado la frontera y la pandemia, porque ha bajado el número de clientes en su negocio.

Yasmina tiene confianza en los productos y en la atención que recibe en una de las panaderías del barrio y siempre que puede acude allí a hacer sus compras.

 

Compartir

Artículos recientes

Prueba Video Embed DailyMotion

La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…

9 horas hace

Los Caleros de Ayamonte de Pepe Gámez

En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…

2 meses hace

Indagando sobre el sentido del temor a la muerte

Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…

2 meses hace

Percebes

De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…

2 meses hace

Derecho a discrepar

Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…

2 meses hace

Verano del tiempo viejo (VII)

Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…

2 meses hace