El consejero de Seguridad Ciudadana viajó a Málaga para conocer de primera mano los progresos del Ayuntamiento en la aplicación de su Plan de Movilidad Urbana. La experiencia del Ayuntamiento de Málaga en la aplicación en los últimos seis años de su Plan de Movilidad está sirviendo al consejero de Seguridad Ciudadana, Javier Calderón, de ejemplo para elaborar el mismo plan para la ciudad de Melilla. Tras mantener una reunión con los responsables del Área de Movilidad malagueño, Calderón aseguró a El Faro que imagina la Avenida Juan Carlos I Rey peatonalizada y con la actividad que tiene hoy la calle Larios, en Málaga. Este proyecto y la perfecta compatibilidad del tráfico de vehículos y bicicletas por las calles de Melilla son algunos de los objetivos deseados por el consejero de Seguridad Ciudadana. El Ayuntamiento de Málaga lleva al menos seis años poniendo en práctica su Plan de Movilidad con importantes progresos, pero Calderón subrayó que para que este plan comience a andar en Melilla y consiga los resultados deseables, habrá que emplearse a fondo en la concienciación ciudadana. “Todos debemos concienciarnos en el uso de la bicicleta y del transporte público para que Melilla sea en un futuro una ciudad sostenible”, apostilló el consejero. Sólo así, Calderón puede imaginar la arteria principal del centro de Melilla, la Avenida Juan Carlos I Rey, peatonalizada, con los aparcamientos públicos necesarios, y en la que los melillenses puedan pasear, comprar en las tiendas y consumir en cafeterías, bares y restaurantes. Para la consecución de este objetivo, el consejero quiere contactar con todos los colectivos sociales y políticos de la ciudad para aunar esfuerzos y enriquecer el Plan de Movilidad de Melilla. “Entre todos tenemos que poner en marcha este proyecto a través del diálogo con asociaciones de vecinos, comerciantes, hosteleros, grupos ecologistas, plataformas sociales y partidos políticos. Debe ser una labor de todos”, reiteró. También habrá carril–bici Igualmente, los contactos con el Ayuntamiento de Málaga serán frecuentes para aprender de los éxitos y progresos en la aplicación de su plan, pero también “para no cometer los mismos errores”. Para ello, Calderón afirmó que se han comprometido a intercambiar información trimestralmente. Otro de los proyectos demandados por los melillenses es el carril–bici. Con respecto a esto, el consejero dijo abogar por la compatibilidad de la circulación de vehículos y bicicletas sin necesidad de crear un carril específico para estas últimas. “Se crearán carriles–bici allá donde sea necesario, pero también existe la fórmula de limitar la velocidad en algunas partes de la ciudad a 20 ó 30 kilómetros hora para que los coches y las bicicletas compartan el mismo espacio. El carril–bici estaría marcado en la propia calzada”, explicó. Así pues Calderón seguirá en contacto con el concejal de Movilidad de Málaga y los responsables del Área de Movilidad. Asuntos como el transporte público, la peatonalización de viales o la habilitación de aparcamientos públicos han quedado en el tintero para próximos encuentro entre ambas ciudades.