Con las obras de peatonalización del centro de Melilla, se están replantando árboles. Como en otras zonas de Melilla, y en concreto de su principal núcleo urbano, en la calle Sidi Abdelkader la especie escogida es el Brachychiton o braquiquito. Algunos melillenses se han quejado de que muchos de estos árboles son caros y algunos tienen ramas rotas o secas.
Pero otros creen que hay que darles tiempo para que se adapten y ven de forma positiva la presencia de estos árboles. Uno de esos melillenses es Próspero. Cree que aunque estén ahora "un poquito descarbados", pero al ser de hoja caduca "luego se pondrán bonitos".
Pensando en que mejorarán en un tiempo, Próspero recuerda que hace un año se colocó una alineación de braquiquito en el barrio El Industrial y que "ahora están un poquito mejor".
Hay quienes reconocen que no son expertos en jardinería, como Jesús. "Paso poco por aquí, pero no me parece mal que los pongan, parecen bastante bonitos y nuevos", expresa señalando que los ve en aparente buen estado.
Otro melillense que pasea por el cruce de la calle Sidi Abdelkader con la calle General Pareja es Carlos. Acaba de salir de una convalecencia y señala que El Faro le ha encontrado fortuitamente en uno de los primeros días en los que sale a pasear.
No le ha dado tiempo a fijarse en los árboles, confiesa. Pero asegura que “todo lo que sea embellecer la ciudad" a le gusta.
"Nos merecemos que nos pongan las calles cómodas, todo de acuerdo a las circunstancias y la vida de hoy día. Si hay que poner estos árboles que los pongan, eso no es nada malo", comenta.
Algunos como Ahmed ven que puede hacer cierto deterioro, pero desconoce a qué puede deberse. "No sé si será por algo del cuidado, del riego o del trasplante, también la polución y todo eso afecta, creo yo", dice este melillense. Aunque valora de forma muy positiva que se planten estos árboles en la zona. "Son los pulmones de la ciudad".
Por otro lado, Francisco Pérez, coordinador del Grupo de SEO BirdLife en Melilla, en declaraciones a este medio, pone sobre la mesa que el braquiquito es una especie procedente de Oceanía que se adapta muy bien al clima mediterráneo.
"No les viene mal porque son unas especies muy aclimatadas a temperaturas cálidas y que no toleran bien el frío", explica el experto.
Pero el problema que observa es que se trata de una especie "muy cara" cuyo ejemplar puede llegar a costar más de mil euros.
Además, dice que es "extremadamente delicada" en el momento del trasplante. De esta forma, explica, el transporte, la incorrecta puesta en el macetero o alcorque, cualquier rotura de rama o agresión "puede resultar critico para este árbol".
Pérez recuerda que en una calle del barrio de Corea, en el Hipódromo, se plantaron estos árboles y más de la mitad de los ejemplares tuvieron que ser retirados a los pocos días porque se habían muerto en el proceso.
Si son unos árboles supuestamente tan caros y cuyo cuidado no se hace con la formación y el cuidado adecuado para que estos puedan sobrevivir, esto podría ser un "coladero de dinero" por plantar una especie "exótica y ornamental" en vez de hacer una apuesta por otro árbol "más adecuado" que pueda dar, incluso, más sombra.
En definitiva, como dice Pérez, parece que "lo que se busca es que sea un árbol vistos. Pero ¿a qué precio?".
El Faro no pudo obtener una valoración al respecto por parte de la Consejería hasta después de la elaboración de este reportaje en vídeo. El consejero Hassan Mohatar explicó que esta especie de árboles, Brachychiton, es la que está contemplada en el proyecto de obras del centro de Melilla.
Su alineación está diseñada por el responsable del área de Parques y Jardines de la Ciudad Autónoma y por el proyectista encargado de la redacción de estos trabajos.
Mohatar ha señalado que por la situación en la que están esos árboles pueden aguantar mejor. “También hemos intentado que no sean muy, muy grandes porque estamos teniendo muchísimos problemas con los vecinos de algunas viviendas”, aseveró.
Hay que recordar que tanto en esta como en otras zonas de Melilla, como en el barrio de El Real, hay vecinos que han denunciado que hay ramas de árboles entrando en sus casas o que no pueden abrir sus ventanas. Muchos de esos ejemplares pueden tener más de veinte años.
“En cuanto al precio del valor de esos árboles, no es ni mucho menos lo que están diciendo”, defendió Mohatar. El consejero dijo que los precios están contemplados en el proyecto de las obras y no le suena “para nada” que el ejemplar haya costado ese dinero.
Aseveró que aún así es una cuestión que consultará al proyectista, aunque el braquiquito es un árbol que según los ingenieros agrónomos técnicos de la Ciudad “es el mejor para esta zona”. “Además, son árboles que posiblemente tendrán que crecer y tendrán un aporte de sombra, pero no son árboles tan grandes que en el futuro puedan perjudicar a los vecinos”, comentó.
Respecto a los desperfectos y posibles agresiones que hayan podido sufrir estos árboles, Mohatar dijo que se revisará lo que ha ocurrido. Aunque entiende que al ser árboles nuevos y recién plantados necesitan un mantenimiento adicional y cree que el hecho de lamentar que tengan ramas rotas o secas es “entrar demasiado al detalle”.
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