El diputado de Somos Melilla, Amin Azmani, calificó como “lamentable que el presidente de la Ciudad, de nuevo, aproveche su posición privilegiada para utilizar el pleno de Presidente de la Mesa, cuyo cometido es moderar el pleno, para contestar a los grupos de la oposición". En este sentido, indicó que "parece ser que a este señor no le queda claro que cuando tenga que contestar a algún diputado tiene que levantarse y ponerse en la bancada del Gobierno. Como presidente de la Ciudad es incomprensible”.
Por otra parte, Azmani considera un “despilfarro y un derroche” el dinero público que “se está gastando este Gobierno en comida, fiestas y copas de vino. Llevamos en seis meses de Gobierno más de 200.000 euros en comilonas, fiestas y copas de vino del Gobierno. Mi pregunta es, en primer lugar, si es necesario este gasto y, en segundo término, qué es lo que se festeja. Le pregunto al señor Imbroda y a sus consejeros cuando alzan la copa y brindan, por quién brindan porque el contexto económico y social de la ciudad es desolador; ¿brindan por qué tengamos más parados?; ¿por qué la sanidad está hecha un asco?; ¿por qué tengamos mayor índice de fracaso escolar? Es que no sé qué es lo que festejan tanto. Esto me recuerda a los mejores tiempos del PP cuando alcanzaron una cifra desorbitada en cuanto a fiestas y comilonas. Melilla no está para celebrar absolutamente nada, estamos para arrimar el hombro y trabajar codo a codo para intentar levantar esta ciudad y es lamentable y penoso que estemos alcanzando la cifra de 200.000 euros. Pero a eso hay que añadir gastos derrochadores como, por ejemplo, 20.000 euros en banderas. Llevamos cuatro contratos, en los que la Ciudad Autónoma ha sacado a concurso la compra y adquisición de banderas. Este mismo salón de plenos, no tiene ni las tres banderas institucionales”.
Azmani se mostró muy tajante con los gastos protocolarios de Presidencia. En este sentido, manifestó que “el señor Presidente, utilizando el último turno de la palabra, decía que sólo habían gastado 111 euros en cuestiones de protocolo. Les voy a decir una cosa. El despacho de Presidencia de la Ciudad ha sacado un contrato para que se le suministren: borrachuelos; napolitanas; bombones, marca Milka, no vaya a ser una marca inferior; Cruzcampo; Heineken. Esto suena a botellón en Presidencia. No suena a actividades protocolarias. El contrato dice, claramente, que el suministro será hasta agotar el presupuesto. Entiendo que se ofrezca un café, incluso un refresco, pero si se quieren ir de cañas y comer napolitanas y borrachuelos que se lo paguen ellos, no a costa del erario público”.
Azmani también denunció que: “Me ha llamado la atención que estando en el hall, el presidente de la Ciudad ha salido, haciendo como una advertencia de que es la última vez que estos señores se quedan a hacer declaraciones en el pleno, que cuando se termina la sesión hay que cerrar la puerta y que si quieren hacer declaraciones, se vayan fuera de la Asamblea como si esto fuera suyo. Yo le digo al señor Imbroda que no se olvide que su escaño vale lo mismo que, por ejemplo, el primer escaño de Somos Melilla, exactamente lo mismo, y no es ni más ni menos que nadie. Por lo tanto, la institución no es de un Gobierno, ni de un partido determinado, ni de un señor determinado. La Asamblea de Melilla es de todos lo melillenses y, por tanto, tenemos derecho a hacer uso de la misma”, zanjó.
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