Algo ha cambiado en esta ciudad. La subida de los precios y la inflación han dejado en casa esta Semana Santa a muchos melillenses. Los que se han quedado, se han sumado a los incondicionales de los desfiles nazarenos y han sido muchos los que se han volcado este año con las procesiones.
Algo ha cambiado en Melilla y se ha notado en las calles, donde cientos de personas han apoyado a las cofradías con una devoción que echábamos en falta porque hace años que no se veía por aquí.
Ha sido la Semana Santa más cara que recordaremos en años, pero ni los precios, ni el cierre de empresas ni la frontera abierta han dejado a nuestros nazarenos solos en los desfiles.
La gente de Melilla, de todas las culturas y de todos los rincones, ha abrazado las procesiones, desde la acera y desde los balcones, aplaudiendo el paso de los tronos, pero también desfilando junto a ellos. De hecho, hemos visto muchas, muchísimas caras jóvenes luciendo con orgullo los trajes de nazareno.
Melilla ha vivido una Semana de Pasión que se recordará en años porque pese a las dificultades que estamos viviendo y a que estamos en la era de la Inteligencia Artificial, hemos podido constatar que la fe sigue moviendo montañas; que nuestras tradiciones están a salvo; que esta ciudad importa a su gente y que su gente mantiene vivas sus tradiciones.
Algo ha cambiado en Melilla y quienes se han quedado esta semana en la ciudad, lo saben. Hace unos años, había espantada en Semana Santa. Los melillenses hacían la maleta y se iban de viaje. La hostelería sufría mientras las navieras y aerolíneas no daban abasto. Ahora hay mucha gente en los desfiles y eso es bueno porque con la gente, también se queda su ilusión y su dinero. Eso es bueno para todos.
Quienes han marchado fuera, encontrarán a su regreso una ciudad distinta. Una Melilla esperanzada, distinta. Una Melilla que no puede ocultar que ha cambiado.
Una muy buenas procesiones en Melilla pues Melilla esta en España y Melilla es España.
Que así siga.
Si se nota el día a día en la compra, pero en la peni sula los precios también no se quedan quietos. Donde llegaremos.
Las procesiones en Melilla son estupendas, habría que pedir que cumplieran el horario, la virgen de la soledad entró en el centro a las 0100 cuando lo previsto era a las 2400, y el encuentro fuė a las 1400 cuando estaba programado a las 1330
Pero si Melilla se parece cada vez más, poblacionalmente hablando, a un barrio de Nador... Esto es un horror
Viva la semana santa en melilla viva España
Hay más gente porque hay menos melillenses que han viajado a la península. El motivo, el precio desorbitado de los billetes de barco.
¿Quién ha escrito esta bazofia de artículo? El nivel del periodismo en Melilla es vergonzoso.
Quien se pica ajos come.....dice el refrán.
Pues por primera vez en mucho tiempo a mí me ha gustado el artículo. No sé, veo que está escrito con ganas y eso lo echaba en falta hace tiempo con los últimos artículos (desde hacía meses)