Aecc y Amecc, demasiadas preguntas sin respuesta

El Faro de Melilla adelantó la pasada semana la noticia de que la Junta Directiva de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) en nuestra ciudad había dejado de estar encabezada por Lely Muñoz y que desde ahora Ana Rodríguez es la máxima responsable de esta organización en Melilla.

Durante días hemos intentado conocer los motivos de la marcha de la primera y las razones de su sustitución por la segunda. Ayer parecía que iba a ser el día en el que, por fin, todo quedaría aclarado. A las 11:00 horas Lely Muñoz había convocado una rueda de prensa para ofrecer unas explicaciones que venía retrasando durante días. Sin embargo, no fue así. El encuentro de la fundadora de la Delegación en Melilla de la AECC con la prensa sólo sirvió para conocer que ahora ha decidido fundar AMECC, una organización gemela a la anterior aunque independiente de la Dirección Nacional de AECC.
¿Por qué? ¿Para qué? ¿Qué beneficios traerá esta nueva asociación para los enfermos de cáncer y sus familiares, que teóricamente son la principal razón de ser de ambas organizaciones? ¿De qué servirá esta competencia (o lucha fraticida, en el peor de los casos)? ¿Cómo saldrá beneficiada la investigación contra esta enfermedad, a la que AECC aporta fondos, como supuestamente también hará a partir de ahora AMECC? ¿A cuál de las dos deben hacer su aportación económica los ciudadanos? ¿Es mejor participar en la cuestación organizada por Lely Muñoz el próximo miércoles para AMECC o es preferible esperar a la siguiente semana para hacer la aportación a la AECC, dirigida en Melilla por Ana Rodríguez?
Preguntas que siguen esperando una respuesta.
¿Qué importancia tiene que AECC continúe gestionando sus propios recursos y solicite a Madrid el dinero necesario para hacer frente al pago de facturas cuando no cuente con recursos suficientes, como reclamaba Lely Muñoz? ¿Qué dificultad hay en que AECC Melilla entregue todos los fondos que recaude a la Dirección Nacional de AECC y después ésta, a su vez, asuma todos los gastos de la entidad en Melilla, como exigen desde Madrid?
Otras dos preguntas sin respuesta, que dan lugar a muchas elucubraciones y que pueden acabar originando demasiadas suspicacias al rededor de ambas entidades teniendo en cuenta que éstas deben sobrevivir gracias a la convicción de los ciudadanos de que el dinero que éstos aportan es gestionado de manera impecable y destinado a un fin noble. La sombra de la duda planea sobre AECC Melilla y AMECC por las numerosas preguntas que siguen en el aire y por el poco interés en dar explicaciones por parte de los responsables de ambas instituciones.
La existencia de una asociación con el espíritu solidario y los objetivos desinteresados de AECC o AMECC es imprescindible para los enfermos de cáncer, para sus familiares, para continuar investigando sobre esta enfermedad... Por encima de quién se coloque en su dirección, lo verdaderamente importante son los fines altruistas de ambas asociaciones, la colaboración altruista de los ciudadanos, la ayuda altruista de los colaboradores... el altruismo por encima del mero protagonismo social.