La delegación melillense de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) organizó este lunes, junto a la Unidad contra la Drogodependencia, una mesa informativa en la que se animaba a la población a dejar de fumar. Se realiza así una de las actividades por el Día Mundial contra el Tabaco. Acudieron a esta mesa informativa el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro; el consejero de Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand; y el director territorial del Ingesa, Omar Haouari, entre otras autoridades. También se contó con la visita de miembros de la Fuerzas Armadas. La AECC quiere ampliar el número de espacios en los que se prohiba fumar para proteger a los niños. De hecho, tiene como objetivo que en el 2030 se dé la primera generación sin humos.
El presidente de la Ciudad comentó que el tabaco es otra pandemia más. Subrayó que es un día para concienciarse sobre el gran problema que es el tabaquismo.
De Castro aseveró que el tabaco provoca un gran número de enfermedades y éstas generan un gran coste a la sanidad.
“Hay que hacer todo lo posible para que la gente que todavía fuma, deje de fumar. Es difícil y lo sé porque lo hice hace 30 años, pero se puede conseguir. Animo a todos los que fuman a apagar la colilla porque no solo ganarán en salud, sino que todos ganaremos en sanidad porque se atenderán a menos enfermos con patologías vinculadas al tabaco”, dijo.
Por su parte, la presidenta de la AECC en Melilla, Ana Rodríguez, subrayó que muchas de las iniciativas de la AECC van encaminadas a luchar contra el tabaco porque una tercera parte de los casos de cáncer tienen que ver con el consumo de tabaco, que tiene más de 70 sustancias cancerígenas.
Rodríguez aseveró que hay dos tipos de campaña desde esta entidad. Por un lado, comentó que están muy preocupados por los menores de edad.
Explicó que el Observatorio del Cáncer tiene datos de que 9 de cada 10 fumadores activos fuman delante de menores de edad. Y esto ha llevado a la recogida de firmas desde la AECC para que el Ministerio de Sanidad amplíe y refuerce la actual ley antitabaco aumentando el número de espacios libres de humos.
Por otra parte, la asociación explicó que se está colaborando con las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPAS) porque la idea es que haya la primera generación sin humos en 2030. Subrayó que el proyecto es que los niños que cumplan 18 años en 2030 no hayan respirado humos ni hayan fumado. Y recordó que un adulto puede elegir fumar, pero el menor que está con él no y se debe tener en cuenta.
Rodríguez indicó que son 8 millones de españoles lo que hay fumando en el país y 2 millones desean dejar de fumar, pero solo un 20% cuenta con las ayudas.
La presidenta de la AECC en Melilla comentó que en la ciudad se cuenta con los cursos de deshabituación tabáquica gracias a la ayuda de la Consejería de Políticas Sociales y no han parado ni durante el confinamiento. Subrayó que el problema es “acuciante” porque había personas que habían dejado de fumar y con la crisis sanitaria ha vuelto a ello e incluso se ha incrementado el número de fumadores en el país.
Pero para Rodríguez hay dos cuestiones que analizar en cuanto al tabaco, por un lado está la prevención en donde interviene Salud Pública, y la otra es el tratamiento que depende del Ingesa, que tiene en su cartera básica la deshabituación tabáquica. La idea es llegar a más personas para que dejen de fumar.
Por otro lado, el consejero de Políticas Sociales indicó que el lema de este Día Mundial contra el Tabaco es ‘Comprométete a dejarlo durante la Covid-19’ y se trata de una campaña que inicia la OMS. El objetivo es durante un año animar a lo fumadores a dejar este hábito. Entre las actividades, habrá mensajes por WhatsApp y también la publicación de más de 100 razones para dejar el tabaco.
“Melilla es una ciudad comprometida con la salud y se suma a esta campaña para mejorar la salud de la ciudadanía”, aseveró.
Mohamed Mohand comentó que habrá varias estrategias que ofrecer a los fumadores para que puedan dejar este hábito y también para generar espacios sin humo para el resto. Una de ellas es facilitar herramientas para ayudar a dejar de fumar y también hay otra encaminada a informar a los consumidores sobre las campañas de la industria tabacalera.
“La OMS crea y dinamiza comunidades digitales para que ofrezcan a las personas el apoyo social para dejar de fumar”, aseveró el consejero de Políticas Sociales.
Mohamed Mohand reconoció que dejar de fumar no es un asunto sencillo y menos con la tensión vivida en este último año con la llegada de pandemia y la crisis económica derivada de ella.
También comentó que solo un tercio de los que desean dejar de fumar tienen acceso a las herramientas para conseguirlo.
Este Día Mundial contra el Tabaco se centra también en los jóvenes, ya que se les explica cómo es el marketing de la industria que desea adherirlos cuanto antes para tener adultos en un futuro consumiendo tabaco.
Pero la pandemia también está provocando un cambio de prioridades y la mejora de hábitos hacia los más saludables por parte de la población y la OMS quiere aprovechar esto para lanzar la campaña.
“El corononavirus ha hecho valorar mucho más la salud hasta convertirla en un tesoro que todos debemos de proteger”, concluyó.
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