El presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas, consideró ayer “inaceptables y peligrosas” las manifestaciones de un imán marroquí en las que pedía un “castigo divino” para los policías que detuvieron en la ciudad a ocho personas acusadas de presuntas prácticas terroristas yihadistas. En el vídeo, que aparece subtitulado en castellano, se lanzan proclamas a favor de “nuestros hermanos encarcelados injustamente”, y amenazas contra los policías que detuvieron y encarcelaron a los presuntos islamistas, así como contra las familias de los agentes. La difusión a través de YouTube del vídeo motivó la apertura de una investigación para determinar si existe delito en esas manifestaciones que se habrían realizado en la mezquita de Benzú, situada junto a la frontera que separa Ceuta de Marruecos.
En declaraciones a los periodistas, Vivas aseguró que las declaraciones del imán son “peligrosas porque esa apelación al castigo puede derivar en una incitación a la violencia y son unas manifestaciones absolutamente rechazables”.
El presidente ceutí mostró su “apoyo, respeto y mayor de las consideraciones” a los agentes que participaron en la operación del pasado 21 de junio que supuso el arresto de ocho ceutíes, supuestos integrantes de una red de captación y envío de personas para combatir en Siria. Vivas afirmó que los agentes policiales “no están solos y tienen el respaldo, el afecto y el aprecio de todos los ceutíes porque velan por la seguridad de todos los ciudadanos sin distingos por razones ideológicas, étnicas o culturales”. Además, consideró que lo dicho por el imán “no responde al sentir de la inmensa mayoría de los musulmanes de Ceuta, que son personas de bien”.