Los comerciantes de la frontera creen que los problemas que ha habido en los pasos en las últimas semanas se han difundido y han provocado el descenso en la llegada de viajeros de la Operación Paso del Estrecho (OPE) a Melilla. El presidente de Acsemel, Abdeslam Mohamed, aseguró en declaraciones a El Faro que esta reducción del tránsito es responsabilidad de las medidas adoptadas por el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani.
Mohamed dijo que las protestas y los cierres fronterizos se han difundido rápidamente a través de las redes sociales y por medio de familiares. Esto ha provocado que muchos viajeros elijan otros puertos a través de los que llegar a Marruecos para evitar problemas al cruzar desde nuestra ciudad.
El presidente de Acsemel dijo que, al contrario de lo que se preveía al inicio de esta OPE, ellos creen que la cifra de viajeros y coches que pasarán por Melilla este año podría reducirse hasta la mitad cuando termine la operación. Consideró, por tanto, que medidas como la limitación del horario para el paso de mercancías por Beni Enzar no han tenido ningún efecto positivo.
Hay que recordar que Delegación y Ciudad pusieron este año en marcha un plan especial para la OPE que incluía nuevos desvíos de tráfico, así como restricciones en Beni Enzar, ante la previsión de que pudiera ser una operación más complicada que la de ejercicios anteriores. Las obras del centro comercial, el incremento del volumen del comercio atípico y la expectativa de un aumento de viajeros hizo a las administraciones ponerse a trabajar para evitar que se produjeran colapsos. Sin embargo, un mes después del inicio de la OPE los datos, hasta el momento, no se corresponden con las previsiones y se ha producido una reducción en la llegada tanto de personas como de vehículos.
La asociación Acsemel volverá a tomar medidas ante los problemas en la frontera. El presidente de la entidad de comerciantes, Abdeslam Mohamed, aseguró ayer en declaraciones a El Faro que están satisfechos con la petición de la CEME (Confederación de Empresarios de Melilla) de que el viernes sea día hábil para el comercio atípico. Sin embargo, dijo que por el momento los problemas continúan y que no van a quedarse de brazos cruzados. El empresario, que asegura que los negocios siguen “a medio gas”, explicó que ayer por la noche estaba prevista la celebración de una asamblea para decidir qué medidas se adoptaban para protestar. Los comerciantes plantean varias alternativas, entre ellas una caravana de vehículos o una manifestación en el centro de la ciudad. Lo que tienen claro en cualquier caso es que no van a parar hasta que se les ofrezca una solución, porque consideran que es necesario para la economía de la ciudad.
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