Aclaraciones ante la juez

Platero y López Rueda, también en libertad con cargos y sin fianza. Los cuatro detenidos en el marco de la ‘Operación Ópera’ están en libertad con cargos y sin fianza. Los últimos en abandonar las Torres del V Centenario fueron el interventor de la Ciudad, Francisco Platero, y el jefe de la Oficina Técnica de Protección de Ambiente Urbano, Luis Carlos López Rueda. Ambos pudieron regresar a sus casas pasada la medianoche.
Fuentes del Juzgado de Instrucción número 4, ante cuya titular declararon los cuatro imputados, señalaron ayer a El Faro que éstos no tuvieron que responder sobre ninguna prueba inclupatoria, como grabaciones de intervenciones telefónicas, documentación sobre cuentas bancarias o hallazgos de la Policía Judicial que pusieran en duda su actuación desde sus cargos dentro de la Administración Pública. Las preguntas de la juez María José Alcázar y de la Fiscalía estuvieron relacionadas sobre contratación pública, los procedimientos habituales en la Administración local y aclaraciones del sistema seguido para asignar algunas obras y servicios. Siempre según fuentes del juzgado, no se pusieron delante de los imputados “pruebas contundentes ni inculpatorias”. A pesar del prolongado interrogatorio y de que todos los inculpados fueron detenidos y llevados a la Comandancia de la Guardia Civil antes de ser conducidos ante la juez, las citadas fuentes insisten en que sólo se habló “de forma bastante genérica” sobre contratación de servicios y obras por parte de la Ciudad Autónoma.

Secreto de las actuaciones
Esto es todo lo que ha trascendido sobre lo ocurrido este viernes en el juzgado de Guardia de Melilla en relación a la ‘Operación Ópera’. Por su parte, los abogados de los detenidos se negaron a hacer ningún tipo de declaración respecto del contenido de los interrogatorios. Tampoco quisieron aclarar los cargos que se les imputan a sus defendidos. Aseguraron a El Faro que la juez Alcázar les había advertido de que debían guardar silencio. A pesar de que, como es lógico, los letrados estuvieron presentes durante el interrogatorio de los imputados, la juez les aseguró que esas actuaciones eran “secretas” y no debía trascender a la opinión pública nada de lo hablado en el juzgado. Siguiendo estas indicaciones, los abogados señalaron a El Faro que habían prometido no facilitar a la prensa ningún detalle sobre el interrogatorio ni datos de la investigación de la Policía Judicial que hubieran conocido.
La  ‘Operación Ópera’ salió a la luz pública el pasado 12 de septiembre tras el aparatoso registro que la juez Alcázar y la Guardia Civil realizaron en las dependencias del Palacio de la Asamblea y las sedes de varias consejerías de la Ciudad.
La investigación, que se inició hace más de dos años, parte de la actividad de una gestoría que supuestamente había cometido un presunto delito de blanqueo de capitales. En la documentación incautada, los agentes observaron a anotaciones contables relacionadas con la empresa Reformas y Construcciones Porvenir S.L., cuyo administrador único, A.K., era hasta ahora el pasado viernes el único detenido de la ‘Operación Ópera’.
La investigación recoge que A.K., a través de las diferentes empresas que ha tenido, ha facturado con su único cliente, la Ciudad Autónoma, más de un millón de euros en los últimos cinco años. A raíz de estas pesquisas se inició otra línea de investigación sobre el patrimonio del consejero de Medio Ambiente, José Ángel Pérez Calabuig, el ex titular de Medio Ambiente, Ramón Gavilán, y el director general de la Consejería, José Pastor.
Los tres y el interventor de la Ciudad, Francisco Plantero, pasaron el viernes por el juzgado de María José Alcázar. Su declaración se prolongó desde las 18:30 horas hasta bien entrada la madrugada del sábado. Todos ellos quedaron en libertad. Está previsto que el proceso continúe la próxima semana con el interrogatorio a media docena más de imputados.