“Es preciso cerrar una etapa y para abrir otra y hay que hacerlo con nuevos liderazgos y nuevos proyectos”. Así lo afirmó ayer la diputada socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, que visitó nuestra ciudad para defender la candidatura a la Secretaría General del PSOE de Susana Díaz, en un encuentro con la militancia. Rodríguez se mostró convencida de que Díaz está muy cerca de lograr la confianza de los socialistas para liderar el partido. Señaló que el gran número de avales que ha logrado la actual presidenta de la Junta de Andalucía demuestran que cuenta con el apoyo mayoritario del partido.
“El grado de aceptación es grande y hay mucha ilusión. Estamos más cerca de que Susana Díaz consiga los votos”, aseveró. La diputada del PSOE aseguró que, desde que comenzó esta andadura, han trabajado para ganar y que lo van a seguir haciendo. Eso sí, dejó claro que no se trata de una competición porque todos los candidatos son socialistas y hay que respetar al máximo cualquiera de las opciones.
Sobre qué pasará tras las votaciones del 21 de mayo, fecha en la que se decidirá quién es el nuevo secretario general, la socialista indicó que sea quien sea el que se alce con el liderazgo del partido, lo prioritario y urgente es recomponer la unidad, centrarse en un proyecto político y comenzar a mirar hacia la sociedad. Rodríguez consideró que el PSOE lleva demasiado tiempo analizando sus problemas internos, en lugar de estar más cerca de lo que sucede fuera.
Rodríguez reconoció que a lo largo de todo el proceso que ha vivido el partido desde que Pedro Sánchez decidió abandonar la Secretaría General al no contar con el apoyo de gran parte de la formación en sus decisiones para la formación de Gobierno, el PSOE ha sufrido un grado de división. Apuntó que se ha llegado a las primarias en un proceso difícil. “Nunca un secretario general había dejado al partido en una situación así tras abandonar su puesto”, aseveró.
Nueva etapa
Eso sí, la socialista indicó que la responsabilidad de los problemas del partido no sólo es de Pedro Sánchez, sino de todos los que forman parte de él. Ahora, dijo Rodríguez, es el momento de que se cierre esta etapa, que consideró mala para el PSOE. La socialista señaló que los problemas internos no sólo han provocado fragmentación, sino que también ha hecho que se pierda apoyo electoral.
Una vez que se decida quién va a liderar la formación, la diputada en el Congreso consideró que será el momento de ponerse a trabajar en un proyecto que ayude a España y a la ciudadanía a acabar con unas políticas del PP y de Mariano Rajoy, que a su juicio no han ayudado en nada a nuestro país.
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