Más dinero para la naviera adjudicataria a cambio de mantener el precio de los billetes, tal y como se había planteado en un principio. Así lo piden desde la Asociación de Hosteleros de Melilla después de que la Ciudad Autónoma anunciara el pasado viernes que se convocará un nuevo concurso público para adjudicar el servicio de transporte en barco, cuya principal modificación será un encarecimiento de las tarifas máximas planteadas en el primer pliego. No obstante, hay que recordar que pese a la subida, los pasajes seguirán siendo más baratos que los actuales.
Los hosteleros prefieren que los billetes sean “muy baratos” para atraer a Melilla al mayor número de turistas posible. Por ello, piensan que sería mejor incrementar el precio inicial de adjudicación y no tocar el de los pasajes. El presidente de la Asociación de Hosteleros, Amaruch Hassan, señaló en la jornada de ayer a El Faro que cuanto más bajas sean las tarifas, más visitantes vendrán a la ciudad autónoma, sobre todo los fines de semana.
Con la subida del precio de los pasajes ya confirmada, se mostró esperanzado en que este encarecimiento no sea demasiado elevado. “Hay que marcar la diferencia con los actuales. Si son como los que hay ahora mismo, iremos a peor”, subrayó.
Mucho en juego
Para Amaruch Hassan, el sector de la hostelería, así como el del comercio, “se juega mucho” con el contrato del barco. “Hay que abrir las puertas al turismo para que aumente el consumo. En Melilla nos encontramos como en una jaula”, aseveró. “Si a las compañías de transporte marítimo no les salen las cuentas y no se quieren presentar al concurso, lo mejor sería darles más dinero”, recalcó. Hay que recordar que el portavoz del Gobierno local, Daniel Conesa, señaló el pasado viernes que modificar los 7,7 millones de euros del contrato supondría un trámite muy arduo, al afectar a la partida ya consignada en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
De igual modo, hay que subrayar que, según el Ejecutivo, el precio máximo de los pasajes seguirá siendo notablemente más bajo que el actual. Aunque no hay nada cerrado, se calcula que si los planteados en el primer pliego eran un 40% más bajos que los que a día de hoy están en vigor, con la modificación el descenso sería de un 25%.
“Esperemos que el cambio sea mínimo, que apenas se note”, añadió el máximo representante de los hosteleros. “La diferencia de precio con los actuales billetes debe ser profunda y notable para que venga más gente de la península”, insistió.
La frontera, según el día
Por otro lado, el presidente de la Asociación de Hosteleros subrayó que la llegada de clientes de Marruecos depende del estado en que se encuentre la frontera. “Si no hay atascos, se nota bastante. Cuando Beni Enzar y Farhana funcionan con normalidad, se ve más gente, tanto en los locales de hostelería como en los comercios”, recalcó Amaruch Hassan.