El delegado de CCOO dice que la empresa le ha comunicado que sólo contratará personal si el incremento de trabajo es “alarmante”.
La Dirección de Zona de Correos en Granada de la que depende Melilla ha comunicado al delegado sindical de CCOO, Juan Diego Román, que no contratará el refuerzo navideño por el momento a no ser que el volumen de trabajo sea “alarmante”, según explicó a El Faro el propio Román. La sobrecarga de trabajo en estas fechas sigue siendo muy alto, por lo que el sindicato seguirá insistiendo en que se contrate al menos una persona en el servicio de Urgente.
Las colas de espera en el servicio de Paquetería en la calle Pablo Vallescá continúan siendo largas. Según explicó Román, estas prolongadas esperas son consecuencia de la saturación que tienen los trabajadores del área de Reparto. “Si no pueden entregar los paquetes en los domicilios porque tienen que ir rápidamente a otro destino, deben dejar un aviso para que el destinatario vaya a Paquetería a recoger su correspondencia. Por este motivo se producen las colas”, argumentó.
Aún con la saturación que denuncia CCOO, la empresa les ha comunicado que de momento no habrá refuerzo en la plantilla para estas fechas, a pesar de que otros años durante las fiestas navideñas sí se han realizado algunas contrataciones para agilizar el servicio de Correos en la ciudad.
Por ello, Román confirmó que los trabajadores continuarán con las concentraciones matutinas en la sede de Correos en el barrio del Industrial. La próxima protesta está prevista para el jueves 26. Para el mes de enero, aún habrá que esperar a que los compañeros de CCOO en Madrid les informe de los avances en las conversaciones con los responsables de Correos para ver si las protestas continúan en 2014.
Colas en Paquetería de Correos
El servicio de Paquetería de Correos en la calle Pablo Vallescá registraba ayer largas colas de espera de melillenses que tenían que recoger sus paquetes. Esta imagen enviada por una lectora de El Faro denunciaba que tenía el número 83, mientras que el marcador luminoso aún marcaba el 59, por lo que aún le quedaba un buen rato de espera para poder recoger su correspondencia.