El consejero de Economía señaló que la Comisión debe dedicarse a “asuntos del alma y de Dios”.
El consejero de Economía, Daniel Conesa, pidió ayer a la Comisión Islámica de Melilla (CIM) que se ocupe “de los asuntos del alma y de Dios” en lugar de participar en política. “Creo que la CIM debería de dejar de hablar del delegado del Gobierno o de cómo funciona la frontera de Melilla”, precisó Conesa.
El consejero de Economía aconsejó a la Comisión que elija otro portavoz distinto a Samir Mohamed Tieb para evitar problemas. “Lo único que hace el actual es echar más leña al fuego”, valoró Conesa. Asimismo, insistió en que dentro de la CIM hay personas muy válidas que podrían representar a la entidad de mejor forma que como lo hace Samir Mohamed Tieb.
El consejero recordó que la Ciudad ha concedido este año una subvención para las actividades de la CIM y señaló que si bien es cierto que cualquier ciudadano tiene derecho a hablar del tema que considere oportuno, también lo es que sería mejor que la Comisión se encargara de asuntos espirituales, para evitar generar polémica y confrontaciones en la ciudad desde una asocación religiosa.