El coordinador de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Emilio Guerra, acusó ayer al consejero de Medio Ambiente, José Ángel Pérez Calabuig, de “forzar al cierre” a empresas que “históricamente” se han dedicado al desguace de vehículos.
El líder magenta aseguró que “la intransigencia de las autoridades locales” están impidiendo que estos negocios melillenses se adapten a las nuevas normativas sobre tratamientos de residuos de coches.
Guerra explicó que el Ejecutivo local sólo ha adjudicado a una empresa con capital municipal, Remesa, la autorización para tratar este tipo de residuos. Afirmó que esto “es quedarse de un plumazo con todo el mercado del sector y es una clara competencia desleal”.
Por último, el coordinador de UPyD en Melilla pidió a Pérez Calabuig que explique por qué se está poniendo tantas trabas administrativas a las empresas locales que desean adaptarse a la normativa sobre residuos de vehículos.