El Museo del Automóvil organiza una concentración en Rostrogordo de vehículos con historia.
Una motocicleta BSA modelo Blue Star es la principal protagonista de los museos de las Peñuelas. Se trata del vehículo a motor de dos ruedas más antiguo que se conserva en Melilla. El Museo del Automóvil la ha cedido junto a otras piezas para que los visitantes de las Peñuelas puedan disfrutar de la historia que se puede narrar a través de este vehículo. Junto a esta antigua motocicleta, los melillenses podrán ver de cerca una moto muy conocida por los ciudadanos, como es la Honda de color blanco que utilizó la Policía Local en los años 60.
La consejera de Cultura, Simi Chocrón, presentó ayer estas piezas del mes, una iniciativa con la que se pretende animar a los melillenses para que conozcan los museos que están en El Pueblo. Destacó que se había elegido estos vehículos del Museo del Automóvil porque el próximo sábado 21 de septiembre se celebran unas jornadas a nivel europeo sobre el patrimonio de la automoción. De esta forma, Melilla se sumará a decenas de clubes y museos que reivindican un mayor reconocimiento del patrimonio automovilístico.
Piezas con historia
Federico Navaja, socio del Museo del Automóvil de Melilla, explicó que además de ceder a las dos motos que forman parte de esta exposición, los melillenses descubrirán tres piezas que son las más antiguas que se conservan en esta institución. Una de ellas es un cuenta kilómetros de un vehículo del año 1910. Navaja indicó que el primer coche que llegó a Melilla fue en 1909, por lo que este contador tan sólo dista un año de ese primer coche que circuló por la ciudad.
También está expuesta una bocina manual de los años 20, que perteneció a un vehículo de servicio público porque es de un gran tamaño como para que utilizara un turismo, apuntó. Además, se cuenta con una bomba de pie para inflar las ruedas de los vehículos, un elemento que era indispensable en los años 20 porque no se habían inventado aún los neumáticos vulcanizados y los caminos estaban muy maltrechos, por lo que cada dos por tres las ruedas sufrían un pinchazo. Añadió que estas bombas eran tan necesarias hace 90 años como ahora lo son los triángulos y los chalecos reflectantes.
El Museo del Automóvil también ha cedido un uniforme que perteneció a la primera patrulla motorista de la Policía Local de Melilla. Un traje que fue confeccionado en el año 64 y que donó José Nieto Egea, el agente que lo llevó durante varios años, a esta institución.
Por otro lado, Miguel Ángel Hernández, socio del Museo del Automóvil, indicó que el sábado 21 de este mes realizarán una concentración de coches y motos antiguas en Rostrogordo. El objetivo es celebrar las jornadas sobre patrimonio automovilístico.
Contarán con quince aficionados a estos coches con historia que proceden de la península y que tienen mucho interés en conocer la vida y la cultura de Melilla, según indicó Hernández. Los melillenses que tengan coches que consideren que tienen unos años o los que deseen conocer estos vehículos podrán acercarse al Fuerte de Rostrogordo de 11:00 a 12:00 horas, explicó.
Tras las charlas entre los aficionados, todo el grupo realizará una ruta por la ciudad. Hernández señaló que tomarán la carretera de circunvalación hasta el barrio del Hipódromo para recorrer el Paseo Marítimo y subir hasta Melilla La Vieja. Aparcarán en la plaza de Estopiñán sobre las 13:00 horas y luego visitarán las Peñuelas para dar a conocer estos museos a los foráneos del grupo.
Más de 12.000 visitas a los museos en julio y agosto
La consejera de Cultura, Simi Chocrón, informó ayer de que a lo largo de los dos meses de verano se ha contado con la visita de un gran número de personas a los museos Etnográfico de la Cultura Sefardí y Bereber, Arqueológico y la Casa Ibáñez. Del total, alrededor de mil personas son extranjeros y otras 2.000 son melillenses. Chocrón destacó que estaban muy satisfechos con todas estas cifras porque mostraban el interés de los turistas por la cultura de la ciudad. Además, resaltó que 2.180 melillenses se hayan animado en estos meses de verano a visitar los museos que tienen tan cerca.
En concreto, el número de personas que se acercó al museo Etnográfico fue 4.052, mientras que el de arqueología contó con 5.815 visitas y el Museo Casa Ibáñez, situado en la Torre del Reloj, contó con 2.229 visitantes.