Según CSIF, la UTE Melilla quiere penalizarle por ausentarse de su puesto de trabajo para prenderse fuego.
El trabajador que hace trece días intentó quemarse a lo bonzo en la puerta del Palacio de la Asamblea se enfrenta a una posible sanción por parte de la empresa adjudicataria de la limpieza, la UTE Melilla (Urbaser y FCC), por una falta grave. Según informó el presidente del Comité de Empresa, Antonio Guerrero (CSIF), la empresa le quiere penalizar por ausentarse de su puesto de trabajo durante su turno. Guerrero aseguró que está intentando mediar con la empresa para evitar que este trabajador sea sancionado, un padre de familia con cinco hijos.
El responsable sindical explicó a este diario el mismo día de los hechos que en los últimos días había habido trabajadores que se quejaban por el tipo de contrato que la empresa les ha ofrecido. Tras un contrato temporal, se les propone uno por obra y servicio, que a su juicio es como un “indefinido”, debido a la relación entre la UTE y la Ciudad Autónoma. Guerrero aludió a que éste fue posiblemente el problema de este empleado que intentó quemarse a lo bonzo, hecho que dijo no entender “habiendo otros trabajadores, como los vigilantes de Serramar, que ni siquiera cobran su sueldo”.
Guerrero dijo no explicarse el por qué este empleado hizo lo que hizo y aludió a que posiblemente “entre la familia y los compañeros de trabajo o amigos le calentaran la cabeza”. Pero a pesar de que su acción es “injustificable”, desde su formación sindical han presentado un recurso a la decisión de Urbaser y FCC para que no sancionen a este trabajador.
Guerrero explicó que también está “peleando” por que la empresa contrate, aunque sea por días, a otro trabajador que estuvo hasta doce días ausente de su puesto de trabajo y que, lógicamente, fue penalizado. En este sentido, el representante sindical reiteró que no entiende cómo hay trabajadores que contando con un puesto de trabajo se quejan, teniendo en cuenta la alta tasa de desempleo de la ciudad y que hay otros empleados que, a pesar de estar trabajando, su empresa no les paga, como es el caso de Serramar.
La rápida actuación de la Policía Local impidió que se quemara
Los agentes de la Policía Local que custodian la entrada al Palacio de la Asamblea consiguieron el pasado 17 de julio frustrar las intenciones de un trabajador de la empresa adjudicataria de la limpieza en Melilla, la UTE formada por Urbaser y FCC, de quemarse a lo bonzo. En torno a las 10:45 horas de la mañana, este empleado se dirigió a la puerta del Ayuntamiento con una garrafa llena de combustible y un mechero. Se roció el cuerpo con el gasoil, según explicó a El Faro el consejero de Seguridad Ciudadana, Francisco Javier Calderón, con la clara intención de prenderse fuego dentro de la Asamblea. El trabajador dijo tener problemas con su contrato de trabajo para justificar su acción. Iba vestido con el uniforme de la empresa de la limpieza viaria, la UTE Melilla, y tras echarse encima el contenido de la garrafa de combustible, comenzó a gritar, según relataron testigos presenciales a este diario. Afirmaba que tenía problemas con su contrato de trabajo, aunque no detalló qué tipo de desavenencias, según los mismos testigos.
Una vez que los agentes de la Policía Local consiguieron detener al hombre, éste fue trasladado a las dependencias del Hospital Comarcal.