La prisión local tiene ahora más actividades para sus internos y estudia la mejora del sistema de videovigilancia l El centro respondió a todas las recomendaciones que se hicieron desde la institución.
l Defensor del Pueblo publicó hace unos días el informe anual del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, en el que se recogen las condiciones que tienen las instalaciones de internamiento de nuestro país, entre los que se encuentran cárceles, hospitales o centros de menores. Además de detectar los problemas que hay en estos espacios, la entidad explica en este estudio cómo han respondido las administraciones a las recomendaciones de la institución. En este punto, de acuerdo con lo que se apunta en las conclusiones del documento, en nuestra ciudad tanto el Centro Penitenciario, como el Centro de Acogida de Menores Infractores y el Establecimiento Disciplinario Militar (EDM) de la Comandancia han tratado de solucionar los defectos que se detectaron en las visitas realizadas por el Defensor del Pueblo en el último año.
La cárcel de la ciudad es el centro de internamiento en el que esta institución detectó más deficiencias en sus visitas. Una de las conclusiones que se recoge en el informe es que el sistema de videovigilancia estaba obsoleto y que era necesario que permaneciera en funcionamiento en todo momento, una deficiencia que se observó tanto en la visita de 2010 como en la de 2011. En concreto, en el informe de 2011 se indica que en el centro penitenciario de nuestra ciudad este sistema cubría únicamente los patios y los pasillos intermodulares. Ante la propuesta de mejora, desde la prisión local se ha decidido estudiar el funcionamiento del sistema actual y su posible modernización, aunque la puesta en marcha de uno nuevo queda pendiente de disponibilidad presupuestaria.
El Defensor del Pueblo indica también que en la cárcel faltaban talleres para los internos. En concreto, en el informe de 2011 se apunta que que deberían de facilitarse más actividades, talleres ocupacionales o cursos para así eliminar los prolongados periodos de inactividad a lo largo del día. Tras enviar la propuesta, el centro penitenciario puso en marcha más talleres de producción propia, aunque el Defensor del Pueblo apunta que aún faltan cursos de colaboración externa con empresas para mejorar la situación de los internos.
En esta misma línea, se señala que las internas no participaban en ninguna actividad fuera del módulo, una deficiencia que, según los datos del último informe publicado hace una semana por parte del Defensor del Pueblo, se ha solucionado por parte de la administración poniendo en marcha más cursos en otras dependencias, que contribuyen a mejorar las condiciones de vida de las presas.
En el informe también se hacen eco de malas condiciones de conservación de parte de las instalaciones del centro penitenciario. En concreto, tras la visita realizada en 2011 se detectó que había restos de óxido en numerosas puertas. La administración reconoció este problema y aseguró que tratan de pintar de forma asidua aquellas zonas en las que se produce este fenómeno, en parte debido a la gran humedad de la zona. En la misma visita de hace dos años se indicaba que no se habían adoptado medidas necesarias para evitar el lanzamiento de objetos desde el exterior, algo en lo que se está trabajando, según aseguran desde la prisión, dentro de las limitaciones presupuestarias.
El Defensor del Pueblo señaló, además, que en el centro penitenciario había algunos defectos en el plan de emergencia ya que los simulacros no contaban con la colaboración de equipos externos de Bomberos o Protección Civil. Por parte de la institución penitenciaria aseguran que se está trabajando en la implantación de este protocolo en respuesta a las peticiones de la institución.
Por último, en el informe del 2011, el Defensor concluyó tras su visita a la prisión un deterioro en las zonas de comunicación con familiares. La prisión indicó que tras haber hecho las intervenciones apropiadas este espacio ese encuentra ahora en buen estado de conservación y mantenimiento.
A través del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura el Defensor del Pueblo se encarga de vigilar que no se producen malos tratos a los internos y que las infraestructuras en las que se encuentran estas personas tienen las condiciones adecuadas. Tras realizar las visitas pertinentes la institución realiza una labor de seguimiento para comprobar si las administraciones responden o no a sus quejas y recomendaciones. De acuerdo con lo que se recoge en el último informe en el caso de Melilla todos los centros respondieron a las propuestas del Defensor del Pueblo y en casi todos los caso se han subsanado los problemas o se está trabajando para conseguirlo.
Otros datos
Policía nacional
Detenidos y llevados al calabozo
El informe del Defensor del Pueblo indica que en 2012 se produjo un total de 5.178 detenciones con ingreso en calabozo en Melilla. Esto supone que en nuestra ciudad tuvieron lugar más arrestos que en Navarra, Cantabria o Extremadura.
Ley de extranjería
La mayoría de detenidos, por entrada irregular
Según el documento, la mayoría de los arrestos que se produjo en la ciudad fue por infracción de la Ley de Extranjería. En concreto, la Policía Nacional realizó 3.330 detenciones por este motivo en 2012.
Lesiones
Presos que trataron de autolesionarse
El informe recoge datos sobre el número de detenidos por la Policía Nacional que intentaron autolesionarse. En nuestra ciudad fueron cinco el año pasado. Todos tenían un pronóstico leve.
Reclusos
Más hombres que mujeres
En total en la prisión local había 319 internos, de los que 85 estaban en prisión preventiva y 220 penados. Sólo 16 eran mujeres y 303 eran hombres.
Repatriaciones
Vía Melilla con destino a Marruecos
Los datos del informe señalan que el año pasado se produjeron 212 repatriaciones de extranjeros a Marruecos vía Melilla.
Comandancia
Establecimiento Disciplinario Militar
Durante el 2012 se produjeron 31 arrestos en el EDM de la Comandancia de Melilla. En el conjunto del país fueron 262.
El nuevo centro de menores infractores cumple el objetivo
Las instalaciones logran solucionar los problemas que se detectaron en el antiguo edificio.
La apertura del nuevo centro de acogida de menores infractores respondió a una de las principales quejas del Defensor del Pueblo sobre las instalaciones de internamiento de nuestra ciudad. El informe publicado este año apunta que en la última visita realizada al centro de menores infractores Baluarte de San Pedro Alto de Melilla se comprobó que las instalaciones no cumplían con los requisitos necesarios para la acogida de jóvenes.
En concreto, se recuerda que en el informe de 2011 se explicaba que durante el recorrido por las instalaciones se encontraron deficiencias como inexistencia de pulsadores de alarma, mangueras y equipos autónomos de extinción de incendios. Asimismo, se apunta que había falta de espacio en los hogares de convivencia, lo que obligaba al aprovechamiento multiuso de dos salas que servían como aulas, comedor y también para desarrollar actividades de ocio. Además, se recoge el hecho de que debido a la antigüedad del edificio, no había ni aire acondicionado ni calefacción. La institución sugirió en tres ocasiones (2004, 2007 y 2011) que se mejoraran las instalaciones, algo que según recoge el último informe, publicado hace una semana, se consiguió el año pasado con la inauguración de un nuevo centro que sí cumple con las condiciones adecuadas para los menores que viven en él. Aunque el Defensor del Pueblo tiene pendiente aún visitar las nuevas instalaciones para comprobar su idoneidad, apuntan que la respuesta por parte de la administración ha sido positiva.
El documento recoge, además, que durante el año pasado no se recibió ninguna queja o denuncia desde este centro de nuestra ciudad, algo que tampoco ocurrió en 2011, cuando a pesar de las condiciones del edificio, los menores no presentaron ninguna reclamación ni por las condiciones de estas instalaciones ni por el trato que reciben por parte de los monitores que trabajan con ellos.