Ahora un pasajero que viaja en barco puede traer compras por hasta 430 € sin pagar IVA ni IPSI. La importación en Melilla de grandes compras hechas en la península, que entran en la ciudad sin tener que pagar IVA ni IPSI, tienen los días contados. La Consejería de Economía y Hacienda y la Asociación de Comerciantes local han pactado dar marcha atrás a la modificación de la normativa que entró en vigor a primeros de año en las ciudades autónomas y que permite a los viajeros introducir mercancías en Melilla y Ceuta por un valor máximo de hasta 430 euros sin tener que abonar el Impuesto sobre la Producción, los Servicios y la Importación ni el IVA.
En principio estaba previsto que el presidente de la ciudad, Juan José Imbroda, y su homólogo ceutí, Juan Jesús Vivas, abordaran en la reunión que mantuvieron el pasado martes en el Senado el tema del cobro del IPSI en régimen de viajeros, de manera que sólo se queden exentas de pagar impuestos las compras inferiores a 90 euros.
Al menos, ése era el compromiso que ambos mandatarios habían contraído en sus respectivos territorios con la Confederación de Empresarios locales, a petición de los comerciantes ceutíes, que fueron los que levantaron la liebre.
Hasta el año pasado estaba vigente una legislación de 1996 que establecía el tope a cobrar a los viajeros en Aduana en las antiguas pesetas. Así, el importe máximo a partir del cual los pasajeros pagaban IPSI se establecía en 15.000 pesetas (90 euros). Este año, con el cambio de normativa que pone la barrera en 430 euros, los melillenses tienen un margen mucho mayor para importar mercancías.
Agravio comparativo
Eso quiere decir que si un viajero hace una compra en la península y se la trae a Melilla, en la Aduana del puerto de Melilla rellena un documento y si lo que ha comprado tiene un valor inferior a 430 euros, le restituyen el IVA y no paga IPSI. En caso contrario, le devuelven el IVA y tiene que pagar el IPSI atendiendo al tipo impositivo que tenga el producto importado.
Y justo esta situación es la que molesta a los comerciantes de Melilla y Ceuta porque si ellos traen mercancía a las ciudades autónomas, valorada, por ejemplo, en 400 euros, sí tienen que pagar el IVA al proveedor de la península y, además, tienen que abonar el IPSI.
Por eso a los comerciantes de ambas ciudades les parece “una barbaridad” la nueva normativa que amplía de 90 a 430 euros el valor de la mercancía que un viajero puede importar.
“Aquí ha habido un error y los políticos de Melilla y Ceuta están trabajando en ello para dejarlo como estaba”, señaló a El Faro el presidente de los comerciantes de la ciudad, Enrique Alcoba.
El máximo responsable de Acome recalcó además a este periódico que la ampliación del tope máximo a importar por un viajero “ha sido un error cometido por no se sabe quién” y que el sector del comercio en la ciudad “estará pendiente a ver cómo ha quedado todo después de la reunión de Imbroda y Vivas del martes”.
Asimismo, Alcoba señaló que la nueva normativa “le da la puntilla” al comercio de las ciudades autónomas y llamó la atención también sobre el comercio fronterizo. “Nos aprietan por la frontera y ahora nos están invitando a que nos dediquemos a otra cosa”, dijo.
Desde que entró en vigor la nueva normativa, insistió Alcoba, los comerciantes de la ciudad han notado que se compra menos en Melilla y más en la península”.
Por último, el presidente de la Asociación de Comerciantes de la ciudad aclaró que “a todos nos gustaría que no se pagaran impuestos”, pero recordó que “todos tenemos una obligación” y que dejar las cosas como están sería un agravio comparativo y competencia desleal para los comerciantes.
La próxima semana Acome espera reunirse con Hacienda para saber cómo quedará el tope máximo a importar por viajeros en Melilla.