H.B. fue pillado ‘in fraganti’ vendiendo CDs piratas de música y videojuegos en el barrio de Cabrerizas. Llevaba dos bolsas llenas de discos cuando una pareja de Policía Nacional que patrullaba la zona le paró para identificarle. Ahora se enfrenta a una multa de 210 euros, acusado en un principio por un delito contra la Propiedad Intelectual, que fue rebajado a una acusación por una falta contra el Patrimonio. El acusado no compareció en la vista oral de ayer, hecho que no impidió su celebración. El juicio quedó visto para sentencia.