Junto a otro varón protagonizaron un altercado en un comercio del centro al resistirse a la detención. A pesar de haber sido invitados a abandonar la tienda de ropa en el centro de la ciudad en la que habían entrado, HMM y FBA, continuaron en el establecimiento hasta que dos agentes de la Policía Nacional llegaron, atendiendo a la llamada del guardia jurado. Los agentes pidieron a ambos individuos la identificación. Uno la facilitó, el otro mostró un cupón de la rifa de la Caridad. Los dos fueron detenidos. Ambos se resistieron a la detención y protagonizaron un altercado que acabaría con todos ellos por el suelo.
Los hechos ocurrieron en septiembre de 2011 y ayer los dos detenidos se sentaron en el banquillo acusados de un delito de atentado a la autoridad y falta de lesiones. Según la versión del guardia jurado del establecimiento, los dos procesados habían protagonizado un incidente con una de las dependientas al ser reprendidos éstos por estar “manipulando los sistemas de seguridad de algunas prendas de ropa”. Al negarse a abandonar la tienda, los empleados llamaron a la Policía Nacional.
El forcejeo con la Policía
Los acusados negaron en todo momento esta versión de los hechos y aseguraron que se estaban probando algunas prendas de ropa y que no tenían intención de robar nada. Ambos aseguraron ante el juez que se vieron sorprendidos por los dos agentes de Policía, quienes les tiraron al suelo para su detención, sin motivo aparente.
El testimonio de los agentes actuantes fue muy diferente. Aseguraron que al llegar al establecimiento, ambos acusados estaban “alterados” y al requerirles el DNI para identificarles, uno de ellos enseñó el cupón de la Caridad y alegó que se había olvidado el carné en casa.
Fue en el momento en el que iban a ser trasladados a la Jefatura cuando se produjo el forcejeo entre los agentes y los acusados, ya fuera del establecimiento de moda, según dijeron los dos policías. Cayeron al suelo y uno de los agentes se hizo daño en una mano. Ayudados por algunos viandantes consiguieron esposarles y llevarles a la comisaría.
Sin embargo, uno de los acusados FBA aseguró que fue la Policía quien le abordó por la espalda, le dio un golpe en el pecho y le tiró al suelo para ponerle las esposas. Su compañero de baquillo, HMM, negó haberse “avalanzado” sobre uno de los agentes y dijo que en ese momento creyó que la Policía había sido requerida por otro altercado en la misma tienda.
Después de las declaraciones de acusados y testigos, la Fiscalía mantuvo su acusación por un delito de atentado a la autoridad y falta de lesiones, mientras que la defensa sostuvo que no se trata de un atentado. En todo caso, los abogados de la defensa los hechos podrían ser calificados como resistencia a la autoridad. De lo ocurrido en el establecimiento fue imposible recuperar las imágenes de sus cámaras de seguridad. El caso quedó visto para sentencia.