La Asociación de Vecinos El Pueblo celebró ayer el Día de la Madre regalando una rosa a cada mujer que se engalanó para disfrutar de la comida que había organizado esta entidad. Más de 60 personas disfrutaron de las delicias de la tierra en un ambiente familiar.
Para esta entidad, la celebración del Día de la Madre es uno de los eventos del año. En su sede, situada junto al museo de las Peñuelas, se dan cita todos los días socios que juegan al dominó y al parchís, pero no siempre logran llenar el local como ayer.
Esta asociación de vecinos también organiza talleres de punto de cruz y manualidades. Esto llama la atención de muchas socias que sin dudarlo invierten algunas tardes para mejorar sus habilidades con el punto o con los pinceles de las clases de artesanías.
El Pueblo es una entidad que sólo está abierta a los socios. Cuenta en sus listas con más de 90 personas que pagan su cuota anual para disfrutar de este espacio. La mayoría vive en Melilla la Vieja, aunque hay otros que se han mudado de barrio, pero que siguen vinculados a El Pueblo.
Rafael Borrego Garbín, presidente de esta asociación, indicó que esta comida también iba a servir para mostrar la cruz de mayo a sus vecinos. Estaba un poco escondida porque las mesas que habían dispuesto en el salón ocupaban mucho espacio. No quisieron perder la oportunidad de que todas las familias de esta entidad admirara esta cruz, que les ha costado hacer muchas horas y con la que competirán en el concurso de Festejos.