Es tradición en algunas casas de la ciudad recitar ‘la Hagadá’, una oración, en hebreo, español, árabe e incluso judeo-español.
La comunidad hebrea de la ciudad inició ayer la Pascua de la Pesaj, una fiesta con la que conmemoran la salida de la esclavitud en Egipto gracias a la ayuda divina. Son ocho días de celebración en los que no podrán tomar nada que lleve levadura, de esta forma, recuerdan que el día que se marcharon de Egipto, no les dio tiempo de que la levadura hiciera efecto en el pan y lo tostaron sin más. También es conocida como la fiesta de la galleta debido a las matzot, es decir, pan ácimo que se consume durante estos días.
‘La Hagadá’ es la oración que se recita durante estos días y en Melilla hay familias que la rezan en hebreo, en español, en árabe e incluso en ladino, es decir, en judeo-español, por haber recibido influencias de varias comunidades con las que ha convivido la hebrea a lo largo de su historia en la ciudad.
También en la gastronomía que se toma durante estos días hay alguna tradición especial en la ciudad. Los dos primeros días y los dos últimos del Pesaj son como si fuera shabat, así que se suele tomar una especie de potaje llamado lactina. Este caldero se hace con carne, patatas y garbanzos, sólo que durante esta pascua se sustituye esta legumbre por habas.
‘La Keará’
Una de las costumbres de esta fiesta hebrea es colocar una bandeja, ‘la Keará’, en la mesa con varios elementos que guardan un gran significado para esta comunidad. Sirve para ejemplificar la esclavitud de Egipto, la liberación y el cumplimiento del precepto de Pesaj. Durante las dos primeras noches de esta celebración, se reconstruye el escenario de los eventos pasados a través de las historias que pasan de generación en generación así como el significado de los elementos de ‘la Keará’.
Galletas, lechuga, frutos secos, apio, cordero y huevo hervido son algunos de los elementos que suelen estar presentes en esta bandeja. Debe haber tres matsot (pan ácimo) para representar las tres categorías de Israel y a los tres patriarcas. La hoja de lechuga, endibia o rábano picante representa la amargura vivió el pueblo hebreo durante la esclavitud en Egipto.
En cuanto a la manzana rallada o dátiles picados, nueces, vino, canela y almendras se combinan en una masa llamada ‘jaroset’ que simulan los ladrillos de argamasa que se utilizaban los hebreos. La pata de cordero o de ave representa el animal que fue sacrificado la noche de antes de marcharse de Egipto y el huevo hervido simboliza la ofrenda que se lleva al Templo.
No se suele trabajar
Pero que los dos primeros y los dos últimos días de esta fiesta sea como shabat implica que también se deben hacer las mismas actividades que durante estos días, es decir, que no se desarrolla ninguna trabajo. Aunque los días intermedios tampoco se suele trabajar, son más permisivos para realizar otras actividades como las labores en el hogar.
Las dos primeras noches, al llegar de la sinagoga a casa, se lee ‘la Hagadá’ junto a toda la familia y reunidos en la mesa. Así se explica a los más jóvenes cómo se vivió la esclavitud del pueblo hebreo en Egipto y cómo fue su salida. Estos relatos se enriquecen con las historias que han pasado de generación en generación y que se suelen contar como una acción tradicional más de esta fiesta.
La Pascua del Pesaj es una de las celebraciones más esperadas por los niños y jóvenes de la comunidad, según aseguró el presidente de la Asociación Mem Guímel, Mordejay Guahnich. Esto se debe a que tienen un papel importante en el relato de ‘la Hagadá’.
Otro de los preceptos de esta festividad es la humildad. Guahnich destacó que se trata de asumir la verdadera dimensión y concienciarse del espacio que se ocupa en el mundo, no de humillarse ni rebajarse. En Pesaj se anima a respetar al prójimo, a saber escuchar, dialogar, a no ser intransigente, no ser obstinado, ni creer que se tiene la única verdad.
Las cuatro formas de denominar a esta pascua
La Pascua del Pesaj tiene cuatro nombres. El primero de ellos, ‘época de nuestra libertad’ es la forma de recordar la salida del pueblo hebreo de Egipto.
‘La fiesta de la primavera’ es el segundo, ya que esta huida se produjo en esta fecha del año y se exige en la Torá celebrar esta fiesta justo durante esta época.
‘La fiesta del pan sin levadura’ es otro de los nombres de esta pascua, ya que durante ocho días sólo podrán tomar pan ácimo o las galletas, llamadas ‘matsot’.
‘Jag Hapesaj’ o ‘la fiesta del Pesaj’ es el nombre de la ofrenda del cordero pascual que se comió en Egipto en familia todo el pueblo antes de marcharse de este país y empezar a ser libre.